¿Por qué a EE.UU. le beneficia la reanudación del conflicto en Donbass?
Rusia, Alemania, Francia y Ucrania podrían ponerse de acuerdo sobre un alto el fuego sólido si EE.UU. y sus marionetas ucranianas no hubieran desarrollado su propio juego con fines distintos, dijo en una entrevista al Canal Uno el director general del Centro de la Coyuntura Política de Rusia, Serguéi Mijéyev. "Y es un juego simple: la guerra en Donbass debe convertirse en una palanca de presión sobre Rusia. El hecho de que los ucranianos estén siendo utilizados como carne de cañón en general no le importa mucho a EE.UU. Para los norteamericanos no es la primera vez", concluye Mijéyev.
Los 'tutores' estadounidenses en Ucrania tratan de matar dos pájaros de un tiro, muestra el canal en su reportaje. En primer lugar, quieren mantener a flote a sus protegidos ucranianos, a los que, si se pone fin a la propaganda de una supuesta amenaza externa, su propio pueblo les pasará factura por el empobrecimiento, la subida de impuestos y prometida pero no materializada entrada en la UE.
Los ucranianos son utilizados como carne de cañón en un plan orquestado por EE.UU.
En segundo lugar, EE.UU. está tratando de mantener en estado de alerta a todo el continente europeo. No es una coincidencia que el comandante del Ejército estadounidense en Europa, el teniente general Ben Hodges, siga alimentando la histeria antirrusa con sus recientes declaraciones de que el Ejército ruso se hace cada vez más fuerte y pronto será capaz de defender sus intereses en varios frentes simultáneamente.
"Todos ellos [los políticos de EE.UU.] se benefician de la guerra en Donbass. EE.UU., en principio, se beneficia de la guerra. La opción más preferible para algunos de ellos es incluso una guerra mundial. De ello habló, por ejemplo, el financista estadounidense Charles Nenner: la guerra mundial permitiría eliminar todos los errores, poner a cero todas las deudas y EE.UU. podría empezar desde una nueva página manteniendo su hegemonía", opina el director adjunto del Centro de Estudio de Ucrania y Bielorrusia de la Universidad Estatal de Moscú, Bogdán Bezpalko.
EE.UU. se beneficia de la guerra
La nueva ofensiva de Kiev en Ucrania va en la misma línea que ya se ha aplicado varias veces en el país. Así, la primera operación de castigo en el este ucraniano fue lanzada por Kiev en 2014 solo después de la visita al país del director de la CIA, John Brennan. El Ejército ucraniano entonces sufrió grandes bajas, se anunció la primera tregua y parecía que se acercaba el final del conflicto. Sin embargo, después de la llegada a Kiev del vicepresidente de EE.UU., Joe Biden, la ofensiva en Donbass se reinició con más fuerza.
Este tipo de visitas de políticos de EE.UU. no siempre se hacen públicas. Es probable que alguno de los 'tutores' de Washington haya visitado Kiev nuevamente y haya dado el visto bueno para una nueva masacre en Donbass, concluye el reportaje.