El portal Look at Me ha reunido nueve zonas del mundo que no se pueden ver a vista de pájaro porque no las sobrevuela ningún avión. Las zonas se pueden encontrar gracias al servicio Flight Radar, que muestra el tráfico aéreo en tiempo real.
El 17 de julio pasado muchos se preguntaban cómo era posible que un avión comercial estuviera sobrevolando la zona del conflicto armado del sureste de Ucrania. Resulta que el espacio aéreo no estaba cerrado, algo que entonces cambió, aunque esto obviamente no puede devolver las vidas de las 298 personas que iban en el avión MH17.
El surgimiento del grupo terrorista Estado Islámico en Siria e Irak causó que los aviones civiles prefieran evadir grandes zonas del espacio aéreo de Siria e Irak.
Pese a que en la península del Sinaí se encuentran algunos de los balnearios más famosos del mundo, como Sharm el Sheij, la Administración Federal de Aviación (FAA) de EE.UU. recomienda evitar el área o al menos sobrevolarla a las alturas máximas debido a la actividad esporádica de terroristas en Egipto.
El conflicto armado entre Etiopía y Eritrea por la independencia de esta última terminó hace un cuarto del siglo y la situación se estabilizó hace tiempo, pero hasta ahora varios organismos de aviación recomiendan no sobrevolar la zona.
En cambio, Somalia, vecina de Etiopía, es un lugar mucho más inestable y en el que actúan varios grupos terroristas sobre los que nadie sabe qué tipo de armas poseen. Así que en el cielo de este país tampoco se pueden ver muchos aviones.
Desde el inicio de la guerra civil en Libia en 2011 está prohibido por cuestiones de seguridad que aviones civiles entren en su espacio aéreo.
Incluso antes del inicio de los ataque aéreos de la coalición liderada por Arabia Saudita, los reguladores internacionales ya aconsejaban evitar sobrevolar Yemen, país desestabilizado por la insurgencia hutí, o como mínimo no volar a menos de siete kilómetros de altura.
Es muy poco probable ver un avión en el cielo de las montañas más altas del mundo, las de la cordillera del Himalaya, por el riesgo de turbulencias. Así que normalmente los aviones evitan el Tíbet y el Himalaya a través del territorio de la India.
En 2013 China limitó unilateralmente los vuelos sobre las islas Senkaku, también conocidas como Diaoyutai, en el mar de la China Oriental, cuya soberanía disputa con Japón. Los reguladores aéreos internacionales aconsejan tener cuidado al sobrevolar esta pequeña zona.