Rusia y EE.UU. tienen diferencias con respecto a la crisis en Ucrania y a la evaluación de su desarrollo, sin embargo ambas partes están de acuerdo en que es necesario solucionarla de manera pacífica, ha declarado el canciller ruso. Moscú y Washington han acordado utilizar su influencia sobre las partes del conflicto en Ucrania para lograr una solución pacífica, añadió Lavrov.
"De los esfuerzos coordinados de Rusia y EE.UU. depende la solución de muchos problemas de actualidad", ha concluido el ministro ruso al precisar que en la reunión además, se abordaron los temas relacionados con el programa nuclear iraní, la lucha contra el terrorismo nacional y la crisis en Siria.
A su vez, Kerry ha expresado su gratitud al presidente ruso, Vladímir Putin, por su franqueza y por su explicación detallada de la postura de Rusia ante una serie de cuestiones internacionales. Asimismo, Kerry ha indicado que Moscú y Washington han acordado continuar en las próximas semanas el diálogo sobre la solución de la crisis en Siria.
Además, Kerry ha señalado que en el este de Ucrania no se está respetando el alto el fuego previsto por los acuerdos de Minsk. "Hay que conseguir que se respete", ha concluido el secretario de estado de EE.UU. Asimismo, el respeto de los acuerdos de Minsk ha sido destacado por Kerry como una de las condiciones del levantamiento de las sanciones contra Rusia.
En lo que se refiere al suministro del sistema antiaéreo ruso S-300 a Irán, Kerry ha reconocido que este tipo de entregas no violan el derecho internacional.
La reunión del presidente ruso, Vladímir Putin, con el secretario de Estado de EE.UU., John Kerry, y el ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, ha durado cuatro horas, aunque originalmente se planeaba una conversación de una hora y media.
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Antes de que Kerry llegara a la residencia presidencial, cerca de la ciudad de Sochi, Lavrov y Kerry también se han reunido para negociar.