Según cree Michael Parenti, los ejercicios que la OTAN desarrolla en Ucrania tienen por objetivo debilitar a Rusia. EE.UU. pone mucho afán en ello, ya que sigue con su modelo tradicional de atacar y aislar a cualquier país que no está dispuesto a convertirse en un satélite de su poder.
"Una de las cosas que hace [EE.UU.] es demonizar al líder de un país (…) para justificar su intervención. Los líderes estadounidenses están demonizando a Vladímir Putin. (…) Nos dicen que los rusos son agresores y están elaborando codiciosos planes para conquistar Ucrania. Esto, pura y llanamente, no es cierto. No pienso que Putin esté intentando conquistar Ucrania de ninguna manera. Sería demasiado complicado, y no es para nada lo que está haciendo", dice el profesor.
El experto destaca que en realidad lo que EE.UU. no tolera son las amenazas al capitalismo corporativo del Estado, como demuestran los ejemplos de China, Rusia, Venezuela e Irak.
"Temen a Rusia si no coopera y no vota como ellos quieren en la ONU o si no acepta las cuotas de petróleo de los cárteles estadounidenses. Pero eso no es lo se le dice al pueblo estadounidense; al pueblo le dicen que este líder es hostil con nosotros, que es casi como Hitler, que tiene armas secretas de destrucción masiva. Estas historias de fantasía no van a ninguna parte, no dicen nada a nadie y eso es lo que estamos viendo hoy. Ucrania es solo otra pequeña marioneta en este sentido. [EE.UU.] tiene tropas en la frontera con Rusia en Letonia, Estonia y Polonia. Ucrania no es geopolíticamente crucial para la seguridad nacional estadounidense. Y si alguna amenaza existe es una amenaza para Rusia, por supuesto. Es como si las tropas rusas aparecieran en México: ¿qué harían los americanos? Reaccionarían histéricamente, ¿verdad?", concluyó el académico.