En las últimas 24 horas, los aviones rusos realizaron 39 vuelos de combate desde la base aérea siria de Jmeimim y llevaron a cabo 60 ataques contra 51 objetivos del Estado Islámico en las provincias de Hama, Latakia, Damasco y Alepo, informó el Ministerio ruso de Defensa.
El Su-24M ruso lanzó bombas de caída libre contra un depósito encubierto de municiones del grupo terrorista cerca de la aldea de Salma, en la provincia de Latakia. La instalación fue completamente arrasada.
Como resultado de los ataques, se logró destruir cuatro puestos de mando, seis almacenes de municiones y armas, una batería de morteros, dos búnkeres subterráneos, 32 campamentos de los terroristas y seis posiciones fortificadas del Estado Islámico.
Reportes de inteligencia y transcripciones de radio indican que los terroristas han entrado en pánico. En las provincias sirias de Idlib y Hama los comandantes de Frente al Nusra llevan a cabo la movilización de los residentes locales bajo la amenaza de ejecutar a sus familias.
Además, entre las distintas facciones terroristas que operan en Siria están aumentando las contradicciones. Una muestra de ello fueron los recientes tres atentados que militantes del Estado Islámico realizaron contra el Frente Al Nusra.