El principal sospechoso de los atentados en París es el nuevo objetivo del Estado Islámico
Se supone que Salah Abdeslam, el terrorista más buscado de Europa en la actualidad, es el único de los responsables de los atentados de París que sigue vivo y se encuentra en libertad. La abogada de su hermano Mohamed, Nathalie Galant, considera que la mejor solución para Salah "es entregarse" a la Policía.
"En cualquier caso, [Salah Abdeslam] no se suicidó durante los ataques en París". Si debía participar en esos hechos, significa que dio marcha atrás y por eso ahora no sólo sería "un objetivo de la Policía belga y de Europa, sino también del Estado Islámico", ha explicado la letrada a la cadena BFMTV.
¿Quién es Salah Abdeslam?
Salah Abdeslam, de 26 años, es el terrorista más buscado de Europa, después de que el cerebro de la sangrienta cadena de ataques muriera durante un asalto policial el pasado miércoles.
Las autoridades francesas indicaron que el terrorista mide 1,75 metros, tiene los ojos marrones y puede estar usando el nombre de Yassime Baghli.
[AppelàTémoin] La #PJ recherche 1 individu susceptible d'être impliqué ds les attentats du 13/11/2015 #ParisAttackspic.twitter.com/Gpr4MY1I53
— Police Nationale (@PNationale) 15 ноября 2015
Posteriormente, la Policía francesa distribuyó una imagen que correspondería con la nueva identidad de Salah Abdeslam, en la que aparece con gafas de pasta y lo que parece un peluquín, con el que se colocaría un flequillo sobre la frente, según 'The Daily Mail'.
Este sospechoso de participar en los atentados terroristas en Francia vivía en el barrio belga de Molenbeek y trabajaba en el metro de Bruselas. Un vecino del lugar, conocido como 'la capital de la Yihad en Europa', reveló que mantuvo una conversación con Abdeslam el pasado martes y que le dijo que se siente "superado" y que "había ido demasiado lejos, pero no podía entregarse porque podría tener consecuencias sobre su familia", según informa el medio belga Sud Info.
Tras los atentados, Abdeslam cruzó la frontera entre Francia y Bélgica. Bruselas aún mantiene el máximo nivel de amenaza y el metro, los colegios y los centros comerciales de la ciudad continúan cerrados.