¿Ha llegado la hora de que EE.UU. disuelva la OTAN?
"La OTAN celebrará su 67 aniversario en abril. En lugar de ser una ocasión para la habitual expresión de clichés aturdidores sobre la perdurable importancia de la Alianza para la seguridad de EE.UU. y la paz mundial, esta debería convertirse en una oportunidad para una muy tardía evaluación sobre si la participación en la OTAN sirve verdaderamente a los mejores intereses estadounidenses en el siglo XXI", afirma el analista Ted Galen Carpenter en un artículo publicado en la revista 'The National Interest'. "Hay una prueba creciente de que no es así", apunta.
Carpenter recuerda que la Europa de hoy es muy diferente a la de 1949 (año en que nació la Alianza) y critica que, a pesar del paso de las décadas, "la pieza central institucional de la OTAN y gran parte de la sustancia política de EE.UU. sigan siendo iguales".
EE.UU., ¿padre sobreprotector?
Como recuerda el analista, actualmente los países europeos "en lugar de ser un acopio de niños vagabundo desmoralizados y devastados por la guerra" tienen "una población y un PIB colectivo mayor que el de EE.UU.".
"La razón principal por la que los países de la UE no han hecho más por gestionar la seguridad de su propia región es que EE.UU. ha insistido en tomar el papel de liderazgo y ha pagado una gran parte de los costos", denuncia el columnista, quien tilda de "carga económica" para EE.UU. a los países de la Unión.
El peligro de añadir aliados como si fueran amigos de Facebook
Asimismo, el experto señala que el "entorno de seguridad europeo" ha cambiado significativamente desde la creación de la OTAN: si durante las primeras décadas de existencia de la Alianza EE.UU. apoyaba a países como Alemania Occidental, Italia, Francia y el Reino Unido, desde el colapso de la URSS Washington ha impulsado la expansión de la organización hacia Europa central y oriental "añadiendo a aliados marginales con la actitud informal con la que algunas personas agregan a amigos en Facebook".
La política de EE.UU. en relación a la OTAN falla cada vez más
"Pero a diferencia de Facebook, las alianzas militares son serias empresas mortales", afirma Carpenter. El articulista advierte del peligro del artículo 5 del compromiso de la OTAN, "que fácilmente podría enredar a EE.UU. en un conflicto armado que tiene poco o nada que ver con su propia seguridad".
"La política de EE.UU. en relación a la OTAN está fallando cada vez más en las pruebas más básicas de relevancia y prudencia. Hace tiempo que es hora de realizar un amplio examen y considerar incluso la opción más drástica: la retirada estadounidense de la OTAN", sentencia.
La OTAN, una maleta sin mango para EE.UU.
Según Alexéi Zudin, miembro del Instituto de Estudios Socio-Económicos y Políticos de Moscú, "para EE.UU. la Alianza Atlántica es una maleta sin mango", informa el portal Ridus.
"En la situación geopolítica real del mundo actual no existen problemas, militares o políticos, que EE.UU. no pueda resolver por sí solo. El bloque de la OTAN para Washington no es una herramienta de seguridad militar; es una institución, con la que se mantiene la unidad y la disciplina en la comunidad euroatlántica", sostiene Zudin.
El descontento con los 'gorrones' crece
"Por parte de EE.UU., las alusiones al enfriamiento del interés de formar parte de la Alianza es más o menos un grueso chantaje a los europeos, porque aparte de ellos y de Canadá el resto de miembros de la OTAN tiene origen europeo o cuasieuropeo", destaca Zudin.
Asimismo, según el experto, en EE.UU. "el descontento con los 'gorrones' crece contantemente, y este, por cierto, se refleja en el fenomenal éxito de Donald Trump con su ánimo aislacionista".