Nuevas lanchas de desembarco, una cuestión vital para que EE.UU. contrarreste a China en el Pacífico
El Ejército de Estados Unidos estudia solicitar propuestas para sustituir sus lanchas de desembarco mecanizadas LCM-8, que siguen en servicio desde la guerra de Vietnam. Se trata de la primera gran adquisición de lanchas de desembarco de los últimos quince años, escribe el sitio informativo Defense News.
El sitio agrega que este concurso público, cuyos detalles se anunciarán en las próximas semanas, "se considera vital para incrementar la atención del Ejército en la costa pacífica", donde EE.UU. ha aumentado sus patrullas navales y ha estado tomando otras medidas para contrarrestar la creciente influencia de China.
Los ganadores del concurso de suministro deberán construir 37 naves de embarcación con un presupuesto de 450 millones de dólares. Estas naves serán usadas por el Ejército norteamericano para realizar misiones de mantenimiento y permitir a las tropas entrar en zonas no permitidas y llevar a cabo el desembarco en orillas de ríos o en lugares que carecen de puerto.
Aumento de la presencia de EE.UU. en el Pacífico
En febrero, la columnista Cynthia McKinney recordaba en un artículo para RT que "EE.UU. ha enviado un constante flujo de buques de guerra a la zona [del mar de la China Meridional], reclamando su derecho a navegar en alta mar". En enero, Washington comenzó a realizar "patrullas" aéreas y marítimas en el mar de la China Meridional, enviando uno de sus buques de guerra a una distancia de doce millas náuticas de una de las islas reclamadas por China. Asimismo, EE.UU. insiste en que continuará con sus patrullas militares en la región, ya que son compatibles con el derecho internacional.
Por su parte, Pekín advirtió a EE.UU. de que protegerá su soberanía en las aguas en disputa en el mar de la China Meridional y rechaza los intentos de utilizar las leyes internacionales y la libertad de navegación como pretexto para socavar sus intereses de seguridad nacional.