"No asesinamos, por ahora": Las Maras alardean en un video de haber reducido los asesinatos

Ante un nivel de violencia récord, con 23 asesinatos diarios a causa de las guerras de bandas, el Gobierno salvadoreño se planteó el pasado mes de marzo implementar medidas extraordinarias, como el estado de sitio. Esto implicaría un aumento de las redadas y operaciones policiales en contra de las bandas del crimen organizado.

Sin embargo, el pasado domingo representantes de la banda Mara Salvatrucha (también conocida como MS-13), de las bandas Mara 18, Sureños y Revolucionarios, todas enfrentadas entre sí durante años, aparecieron unidos en un video para mostrar su rechazo a la violencia, recoge La Información.

"No estamos cometiendo asesinatos… por el momento", aseguraron los pandilleros, quienes afirman haber demostrado tener "poder, capacidad y buena voluntad", a la vez de presumir del éxito de la tregua de tres días, basándose en una notable reducción de asesinatos, "sólo 17 en 72 horas, cuando la media en enero era de 23 diarias".

Barrio 18 y Mara Salvatrucha: las bandas de tercera generación por dentro

Los representantes de las maras pidieron la mediación de las iglesias de distintas confesiones cristianas para que se unan a un nuevo proceso de paz. "Sabemos que no somos unos angelitos. Pero si somos parte del problema, también somos parte de la solución", explicaron y propusieron un alargamiento indefinido de la tregua.

Asimismo, los pandilleros advirtieron a sus miembros de no caer en posibles provocaciones por parte del Gobierno y de las autoridades de El Salvador. "Volvemos a responsabilizar a los funcionarios públicos si acontece algo en contra de nuestros miembros en las prisiones o en las calles", aseguraron los cabecillas, quienes señalaron que ellos son "de palabra" y que saben cumplir. Aunque destacan que no han pactado ni negociado con ningún político.

Se estima que en El Salvador hay alrededor de 100.000 mareros en activo y un millón de personas que prestan ayuda o se cobijan bajo su sistema. El año 2015 cerró con la cifra de 6.670 personas muertas relacionadas con las pandillas.