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China apunta sus inversiones al sur de México
Empresas chinas han puesto sus ojos en las facilidades económicas que otorgan algunos estados mexicanos.
Principalmente enfocados en proyectos relacionados con la industria automotriz, electrónica, energética y aeroespacial, los inversores chinos buscan aprovechar las Zonas Económicas Especiales desarrolladas por el Gobierno mexicano para favorecer el desarrollo de distintas regiones del país.
Así lo explicó Hu Chunhua, secretario del Partido Comunista de China en la provincia de Guangdong (o Cantón), a un grupo de ejecutivos de varias firmas asiáticas que se dieron cita en el Foro de Cooperación y Negocios México-China. "Vamos a apoyar a prestigiosas empresas chinas en México", señaló el funcionario, citado por la revista 'Forbes'.
"Guangdong tiene el mismo nivel de desarrollo que México, así como también muchos puntos en común, como la capacidad económica", agregó Hu Chunhua.
Por su parte, Rogelio Garza Garza, subsecretario de Industria y Comercio de la Secretaría de Economía de México apuntó que las inversiones de la potencia asiática están destinadas a "los estados de Guerrero, Oaxaca, Chiapas, Michoacán, y recientemente también Veracruz y Tabasco".
En concreto, se firmaron 18 acuerdos por 480 millones de dólares de acuerdo a la información difundida por Sergio Ley, presidente para Asia-Pacífico del Consejo Empresarial Mexicano de Comercio Exterior.
Una relación conflictiva
La inversión china en América Latina ha crecido exponencialmente en la última década. Se estima que entre 2005 y 2014, Pekín otorgó créditos por 119.000 millones de dólares a toda la región.
Asimismo, a principios de 2015, el presidente Xi Jinping declaró que China se preparaba para invertir en la región latinoamericana 250.000 millones de dólares en los próximos 10 años.
Entre los proyectos más sobresalientes están la construcción del canal de Nicaragua, que unirá el mar Caribe con el océano Pacífico y el tren bioceánico, que irá desde Brasil a Perú.
Sin embargo, hasta ahora México había sido uno de los países menos beneficiados por la llegada de estos capitales.
Al respecto, la especialista Nayeli Meza Orozco subrayó en 2015 que "la violencia en algunos estados de la República Mexicana y el trato preferencial para otorgar concesiones de grandes proyectos son algunos de los motivos que minan el crecimiento de las inversiones chinas en el mercado mexicano".
Otro inconveniente entre ambos países fue la suspensión del proyecto del Tren México-Querétaro. Ante las denuncias de sobrefacturación del proyecto por parte de empresas chinas aliadas con compañías mexicanas vinculadas al Gobierno de Enrique Peña Nieto, se paralizó la obra generando un conflicto de estado.
No obstante, esto parece haber quedado atrás con las nuevas inversiones en el sur del país, que buscan potenciar el comercio y las relaciones entre ambos países.
"Intentamos abrir un vuelo directo entre Guangdong y México en 2017, lo cual permitirá elevar el comercio bilateral entre ambos mercados", concluyó Hu Chunhua.
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