Tres figuras clave en la crisis de Brasil que tienen relación con EE.UU.
Tras el 'impeachment' que ha alejado de su cargo a Dilma Rousseff de manera temporal, se han conocido algunos detalles sobre los participantes clave en lo que los partidarios de la presidenta brasileña califican de golpe de Estado. Esas informaciones apuntan a la estrecha relación de estas figuras con Washington, si bien la propia presidenta brasileña califica lo que está pasando en su país de "un proceso eminentemente brasileño".
Michel Temer, el presidente interino que fue informante de EE.UU.
De acuerdo con unos cables de 2006 y que ha filtrado WikiLeaks, el presidente interino de Brasil, Michel Temer, fue informante de los servicios de inteligencia de Estados Unidos a través de la embajada de ese país en Brasil.
En una publicación que ha aparecido en el sitio web de estos activistas, figura un documento enviado desde Sao Paulo (Brasil) con destino al Mando Sur de EE.UU., con sede en Miami (Florida). El documento analiza la situación política en Brasil durante la presidencia de Luiz Inácio Lula da Silva y muestra las reflexiones de Temer sobre las opciones electorales de su partido para ese año. En concreto, el actual presidente interino augura una victoria de su partido, el PMDB (Partido del Movimiento Democrático Brasileño).
Otro detalle curioso sobre el actual mandatario es que fue declarado culpable de violar las reglas de financiamiento de las campañas y podrían impedirle presentarse a un cargo electivo por un periodo de ocho años, aunque esa prohibición no le impediría continuar como presidente interino.
Glenn Greenwald, un periodista y abogado afincado en Brasil, ha publicado en The Intercept que este nombramiento puede servir a los intereses de una tercera parte en vez de a los de la nación y que los actuales responsables de gobernar el país planean "nombrar a Goldman Sachs" y a los integrantes del FMI "para regular la economía" o, de lo contrario, instalar un equipo "no representativo" y "neoliberal".
El líder del 'impeachment' en el Senado tiene sospechosos vínculos estrechos con EE.UU.
El senador Aloysio Nunes, integrante del PMDB y responsable del juicio político contra Rousseff en el Senado, visitó Washington durante tres días solo una jornada después de reunirse con diferentes personas, entre las cuales se encontraban algunos miembros de la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado de EE.UU., representantes de la empresa 'lobbista' Albright Stonebridge Group —presidida por la exsecretaria de Estado de Bill Clinton, Madeleine Albright— y el exembajador norteamericano en Brasil, Thomas Shannon, según informó The Intercept.
Por su parte, el codirector del Centro para la Investigación Económica y Política, Mark Weisbrot, reveló a RT que Shannon "ha estado involucrado en otros golpes de Estado" que se han producido en la región, incluidos el de Honduras en 2009 y el de Paraguay, en 2012, y que el propio Nunes se ha pronunciado en repetidas ocasiones a favor de que Brasil establezca unas relaciones más estrechas con EE.UU., en un intento de remediar el escándalo de espionaje entre Brasil y ese país.
Liliana Ayalde, embajadora de EE.UU. con experiencia en golpes
Finalmente, la actual embajadora estadounidense en Brasil, Liliana Ayalde, también puede presumir de haber participado en el derrocamiento de Gobiernos extranjeros, según recoge un informe periodístico.
En 2008, Ayalde ocupaba el mismo cargo en Paraguay cuando el expresidente de ese país, Fernando Lugo, estaba bajo la amenaza de un juicio político: en 2012 fue suspendido de su cargo. El 1 de agosto de 2013, Ayalde tomó posesión de su cargo en Brasil, que ha vivido un 'impeachment' contra Dilma Rousseff.
Carlos Eduardo Martins, profesor de sociología de la Universidad de Sao Paulo, afirmó a TeleSUR que esta embajadora "actuó con gran fuerza durante el golpe de Estado" de Paraguay y ahora emplea "el mismo discurso" en Brasil, ya que argumenta que las instituciones brasileñas no pueden resolver esa situación.
Rousseff: "Este proceso es eminentemente brasileño"
No hay forma de atribuir a ninguna fuerza externa lo que está pasando en Brasil
Con todo, la propia Rousseff sostiene que el 'golpe de Estado' se ha maquinado en el mismo país sin que haya injerencias extranjeras, aunque existan ciertas fuerzas que se beneficien de ello. "Este proceso es eminentemente brasileño, llevado a cabo por fuerzas brasileñas con intereses, claramente, internos. No hay forma de atribuir a ninguna fuerza externa lo que está pasando en Brasil", ha admitido la presidenta brasileña en su entrevista exclusiva a RT.
Al ser consultada sobre los vínculos del actual presidente interino Michel Temer con la embajada estadounidense en Brasil según WikiLeaks, Rousseff ha afirmado que "tener ese tipo de conversaciones con representantes de otros países no es correcto", aunque ha reiterado que no considera una interferencia externa la causa de la crisis política de Brasil.
Como reconoce la presidenta temporalmente destituida, a diferencia de otros golpes de Estado llevados a cabo con las armas en América Latina, este "se da en el marco de la democracia, utilizando las instituciones en provecho de un proceso de elección indirecta que no está previsto en la Constitución". "No sabemos cuáles van a ser sus consecuencias ya que para que no tenga consecuencias tendría que ser un 'impeachment' completamente normal basado en un delito. Como no lo está, es una injusticia, y yo soy la prueba viva de la injusticia", ha resumido Rousseff.