Francia ha desplegado sus fuerzas especiales en el norte de Siria, en las inmediaciones de la ciudad de Manbiy, un lugar estratégico para los militantes del Estado Islámico (EI), informó TV5 Monde.
"La ofensiva en Manbiy claramente está siendo respaldada por cierto número de Estados, entre ellos Francia", señaló el ministerio.
A comienzos de esta semana la exitosa ofensiva de las Fuerzas Democráticas de Siria (FDS), encabezadas por las Unidades Kurdas de Protección Popular (las más poderosas fuerzas de ataque de las FDS), permitió la liberación de varias aldeas alrededor de esta localidad a través de la cual los terroristas accedían al territorio sirio desde Turquía.
Según señaló el ministerio, esta ofensiva, con el apoyo de la coalición liderada por EE.UU., busca dificultar que EI se refuerce, tanto en militantes como en número de armas, y minimizar el apoyo financiero que los yihadistas reciben a través de la frontera con Turquía.
Hasta ahora, Francia había reconoció la presencia de unas 150 fuerzas especiales en la región ubicadas específicamente en la parte iraquí de Kurdistán. Según informó el pasado viernes el ministro de Defensa francés, Jean-Yves Le Drian, en una alocución para la televisión pública, los militares franceses no participan directamente en los combates contra el EI. El Gobierno ha proporcionado su apoyo a través de "suministros de armas y presencia aérea", explicó.
En Irak, las fuerzas especiales de este país combaten al lado de la milicia kurda Peshmerga, el Ejército iraquí y EE.UU. en la retoma de Mosul y participan en labores de identificación y neutralización de artefactos explosivos improvisados.
Actualmente 2.500 militares franceses, 400 de ellos soldados de las fuerzas especiales, están involucrados en labores militares en 17 países, particularmente en la región africana del Sahel.