La alianza atlántica y Rusia ya no son "socios estratégicos", pero no están en una guerra fría, ha anunciado el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, en la segunda y última jornada de la cumbre de la OTAN en Varsovia, según RIA Novosti.
Stoltenberg ha agregado que los líderes del bloque han acordado que las relaciones con Rusia estarán basadas en la defensa y el diálogo.
"Rusia no es un socio estratégico. No mantenemos con Rusia la cooperación estratégica que intentamos crear tras el fin de la Guerra Fría", ha dicho Stoltenberg. "Pero no estamos en una situación de guerra fría. Ahora la situación es completamente diferente", ha agregado.
Sin embargo, las acciones del bloque, que sigue reforzando su presencia militar en Europa oriental cerca de las fronteras rusas, alarman a Moscú. En particular, este viernes en el primer día de la reunión los líderes de la OTAN anunciaron que se establecerán cuatro batallones multinacionales en los países bálticos y Polonia sobre una base rotatoria y que uno de los sistemas de defensa antimisiles desplegados en Europa entrará al nivel inicial de disponibilidad operacional.
La reacción de Moscú no se ha hecho esperar. Desde el Kremlin señalaron que estas medidas "han cimentado el segundo muro de Europa, después del de Berlín". Fueron las palabras del presidente del Comité Internacional del Consejo de Federación de Rusia, Konstantín Kosachev, quien agregó que la retórica actual de la Alianza se basa en la "lógica de la confrontación de la Guerra Fría".
El deterioro de las relaciones entre la OTAN y Rusia
En 2014, la OTAN suspendió la cooperación práctica civil y militar con Rusia en medio de tensas relaciones sobre la crisis de Ucrania, desde que la alianza acusó a Moscú de estar implicado en el conflicto. Sin embargo, no se detuvo el diálogo político en el Consejo OTAN-Rusia.
La OTAN prolonga su misión en Afganistán
Los líderes de la OTAN también han acordado prolongar la misión Apoyo Decidido (Resolute Support) en Afganistán "más allá de 2016". Además, se han comprometido a garantizar su contribución a la financiación de las fuerzas de seguridad de Afganistán hasta 2020.
La misión Apoyo Decidido consiste en el asesoramiento, la asistencia y la formación de las fuerzas de seguridad afganas por parte del bloque militar atlántico.