El Ministerio de Defensa estadounidense ha declarado que EE.UU. continuará llevando a cabo ejercicios militares en el este de Europa, informa RIA Novosti. Según el comunicado oficial del Pentágono, el viceministro de Defensa estadounidense, Robert Work, ha anunciado la decisión de su Gobierno de "seguir adelante con el programa activo de ejercicios militares en Letonia y todo el flanco oriental de la Alianza".
Durante la reunión con el ministro de Defensa letón, Raimonds Bergmanis, Work ha destacado que EE.UU. "desplegará una brigada blindada adicional en Europa". Ambas partes han declarado que "cuentan con que se garantice la presencia multilateral de la OTAN y con cooperar en el futuro". Work ha confirmado también "el compromiso de EE.UU. en el cumplimiento de las obligaciones del Artículo 5 del estatuto de la OTAN sobre la defensa de la soberanía e integridad territorial de todos los 28 miembros de la organización".
Los representantes de EE.UU. y Letonia han conversado sobre la cumbre de la OTAN celebrada el 8 y el 9 de julio en Varsovia y han subrayado que "los aliados están más preparados que nunca para disuadir la agresión externa".
¿"El segundo muro de Europa"?
Durante la cumbre los líderes de la OTAN tomaron la decisión de establecer cuatro batallones multinacionales en los países bálticos (Estonia, Letonia y Lituania) y Polonia sobre una base rotatoria. Uno de los sistemas de defensa antimisiles desplegados en Europa entrará al nivel inicial de disponibilidad operacional. Además, los líderes del bloque incluyeron junto con las armas nucleares un sistema de defensa antimisiles en su sistema de disuasión.
El Kremlin estima que estas medidas "han cimentado el segundo muro de Europa, después del de Berlín", según el presidente del Comité Internacional del Consejo de la Federación de Rusia, Konstantín Kosachev, que destacó que la retórica actual de la Alianza se basa en la "lógica de la confrontación de la Guerra Fría". El primer vicepresidente del Comité del Consejo de la Federación de Defensa y Seguridad de Rusia, Franz Klintsevich, califica las decisiones tomadas durante la cumbre de "pura agresión" y asegura que "las decisiones de la OTAN tomadas hoy tendrán un impacto muy negativo sobre la situación en el mundo en general".