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El millonario costo económico de la violencia en México
En 2015, el Gobierno mexicano gastó 220 billones de pesos (11.182 millones 617.739 de dólares) en aumentar la protección de su población. Este gasto es equivalente al 1,36% de su PIB.
El impacto económico total de la violencia en México fue de 2,12 trillones de pesos (134 billones de dólares) en 2015, lo que representa el 13% del PIB.
La cantidad equivale a 17.525 pesos (1.105 dólares) por cada ciudadano mexicano, aproximadamente dos meses de salario de cada trabajador promedio.
De acuerdo al Índice de la Paz en México 2015 (dado a conocer por el Instituto de Economía y Paz), el aumento del número de homicidios en 2015 costó a la economía mexicana un total de 31 billones de pesos (1,5 billones de dólares). El golpe económico total de la violencia fue un 38% menos en 2015 que en 2011.
En el 2015, el Gobierno federal mexicano gastó 220 billones de pesos (1.818 pesos por cada ciudadano mexicano) para contener la violencia, lo que implica que el gasto oficial para la contención de la violencia ha aumentado más de dos veces desde 2003, señala el informe México Peace Index (MPI).
Con el fin de identificar los beneficios económicos de las mejoras en la tranquilidad, el informe MPI mide lo que se denomina el total del impacto económico de la violencia. Se define como los gastos relacionados para contener, prevenir y tratar las consecuencias de aquella.
Las cifras incluyen los costos directos e indirectos de la violencia, así como un efecto multiplicador. Este calcula la actividad económica adicional que se hubiera acumulado si los costos directos de la violencia hubieran sido evitados.
Los valores económicos aquí presentados se muestran en precios constantes de 2014. Además, el impacto económico de la violencia se incrementó desde 2007, alcanzando un máximo nivel en 2011, año menos pacífico de México en la última década.
Las mejoras en la tranquilidad trajeron noticias positivas y las tendencias más recientes indican que el impacto de la violencia disminuyó en un 38% desde el 2011.
Al respecto, el gasto del Gobierno mexicano para contener la violencia se incrementó en un 12% en comparación con el del gasto general del Ejecutivo, que fue del 9%. En salud y desarrollo económico el gasto creció un 11% y un 10% respectivamente.
El gasto militar tuvo el mayor crecimiento dentro de la categoría para contener la violencia, al incrementarse desde el 0,3% del PIB en 2003 al 0,6% del PIB en 2015.
Aproximadamente el 60% de los empresarios encuestados en 2013 afirmaron que la inseguridad y la delincuencia son las principales preocupaciones para sus negocios.
En el año 2015, a precios constantes, se gastaron 220 millones de pesos (más de 11.182 millones de dólares) en aumentar la protección de la población. Este gasto es equivalente al 1,36% del PIB de México de 2015 y también aumentó 2,5 veces el tamaño del gasto en seguridad interna en comparación al nivel de 2003.
De acuerdo al Índice de Paz en México, la estimación del impacto económico total de la violencia incluye tres componentes:
Costos directos: son los costos de la delincuencia o la violencia a la víctima, al responsable y al Gobierno. Se trata de gastos directos tales como el costo de la Policía.
Costos indirectos: resultantes después de los hechos. Se trata del trauma físico y psicológico, gastos médicos y el valor presente de los costos futuros asociados a la violencia incidente, como la pérdida de ingresos futuros.
El efecto multiplicador representa el efecto en el flujo de costos directos como los beneficios económicos adicionales, que provienen de las inversiones en desarrollo de negocios o educación en lugar de que se ocupen de las consecuencias que produce la violencia.
El término costo de la contención de la violencia se utiliza para explicar el efecto combinado de costos directos e indirectos.
Cuando un país evita el impacto económico de la violencia es consciente del beneficio que trae la paz. México tuvo un beneficio de paz de 802 billones de pesos (más de 40.762 millones de dólares), con una mejora del 13,5% en tranquilidad desde 2011 a 2015.
Narco y crimen organizado
El desglose del impacto económico de la violencia para el año 2015 mostró que el delito violento es la categoría más costosa del crimen después del homicidio. El costo combinado de los delitos violentos y homicidios representó un 84% del impacto económico de la violencia en México durante el 2015.
Por su parte, la tasa de homicidios en México aumentó un 6,3% en 2015. Este resultado originó un impacto económico adicional de 31 billones de pesos (1,57 billones de dólares), incrementando un costo total anual de homicidios desde los 696 a los 727 billones de pesos (36.953 millones de dólares).
Los costos que están asociados con el crimen organizado relacionado con ofensas mejoraron en cada uno de los últimos tres años hasta 2015.
El impacto económico total de las extorsiones y secuestros en México fue de 10 billones de pesos (508.300 millones de dólares) en 2015.
Ello no cuenta para el gran impacto económico del crimen organizado como la inversión aplazada, el consumo y la potencial fuga de capitales. Según este modelo, el costo del crimen organizado no incluye tráfico de drogas relacionado con la actividad económica (producción, transporte, comercio, suministro o posesión).
David Ordaz
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