¿Marca la victoria de Trump el fin de la globalización?
La globalización tal y como la hemos conocido en los últimos 25 años "llegó a su fin" con la victoria electoral de Donald Trump, sostiene el académico brasileño Alejandro Grimson en un artículo.
Según él, tras la caída del Muro de Berlín surgió un "gran relato" que se complementó con el anuncio del 'Fin de la Historia', de las ideologías, las naciones, los Estados y las fronteras, y ahora con el triunfo de Donald Trump toca a su fin.
El denominado 'gran relato' predicaba el avance hacia un mundo más integrado en bloques regionales que harían desparecer lentamente a los "Estados nacionales" donde predominarían las "ciudadanías regionales".
Sin embargo, actualmente vemos "el crecimiento de la xenofobia, el nacionalismo y la derecha política en países tan cruciales como Francia y Alemania", advierte el académico. Y conclute: "El Brexit y Trump son disparos mortales a la globalización. Fin".
Muro y libre comercio
Grimson detalla que la globalización multiplicó "los contactos entre los seres humanos de culturas diferentes", si bien aclara que fue un contacto donde no se profundizó en el conocimiento del otro.
"Y cuanto mayor desconocimiento hay sobre personas con las que interactuamos, mayor es el temor que sentimos ante sus acciones y potenciales reacciones. Todo musulmán puede ser visto como terrorista, todo colombiano o mexicano como narcotraficante, todo otro como peligro", explica.
Por esa razón, observa, si triunfa la política de levantar el muro con México, "ya nada será igual".
En opinión del académico latinoamericano, la globalización otorgó una gran libertad a "los flujos del capital financiero y al comercio internacional", pero levantó enormes barreras a la circulación de personas.
"Nunca se globalizaban los derechos. Cuando unas fronteras se debilitaban (como las internas de Europa) otras se fortalecían (como las de Europa con el resto del mundo)", afirma.
Para profundizar en este tema, RT ha consultado la opinión de tres analistas latinoamericanos.
Juan Barreto, comunicólogo (Venezuela)
La globalización tal y como la hemos conocido hasta hoy entra en una nueva fase con el triunfo de Trump. Y, en este sentido, Juan Barreto, cree que el recién electo mandatario estadounidense reimpulsará a los sectores de la burguesía industrial que fue desplazada por la burguesía financiera.
"Esa burguesía industrial se ha visto afectada en sus negocios por el capitalismo de segunda generación que ha logrado que sea más fácil y más rentable especular en bolsa que fabricar un vehículo o una nevera y venderlos", sostiene.
Asimismo, califica a Trump de "conservador nostálgico que se parece a los primeros capitalistas industriales", ya que "representa la reivindicación de capitalismo de producción material, frente al de producción inmaterial".
Barack Obama gobernó con la banca, puntualiza el académico venezolano, cuando la crisis financiera "otorgó auxilio financiero a los banqueros y no a los ahorristas, lo que afectó a la industria inmobiliaria (de donde proviene Trump), porque muchas viviendas quedaron embargadas sin posibilidad de venta".
También recuerda que durante la campaña electoral Trump visitó Michigan y Detroit y "se lamentó del estado de parque industrial, de la depauperación de sus obreros, que antes habían sido emblema de Estados Unidos".
Por otra parte, Barreto recuerda que el presidente electo plantea rehacer el acuerdo del pacífico (TPP) y que, además, "ha dicho que Rusia puede ser un modelo y no un enemigo".
En todo caso, el experto hace un alto para aclarar que "a partir de algunas declaraciones dispersas de Donald Trump", su impresión, de momento, es la de que "es un misterio".
Vinicius Sartorato, sociólogo (Brasil)
La globalización está siendo golpeada, aunque no únicamente por el presidente electo de Estados Unidos, ya que "existe un conflicto de intereses políticos dentro de la derecha mundial, como el Brexit de Gran Bretaña, por ejemplo", aclara este sociólogo brasileño.
Según él, estos conflictos se originan entre una derecha que se torna más nacionalista, "estatal, intervencionista, populista" y otra "más liberal, tanto en la economía como en otros temas sensibles como la seguridad".
En todo caso, Sartorato se muestra cauteloso y cree que habrá que esperar para saber "cómo va a posicionarse Trump respecto de la OTAN".
La nueva Administración de la Casa Blanca, que se estrena en enero, ha anunciado una línea de trabajo "más intervencionista en la economía de su país"; una línea política que se parece más a un "populismo nacionalista", agrega el sociólogo. "Quizá al principio se incline por generar más subsidios internos que busquen abrir más plazas de empleos", presupone.
El experto achaca el "estado de tensión" actual, en el que "todos miramos lo que pueda pasar en y desde Estados Unidos" al hecho de que Trump proviene de una élite que no tiene experiencia de gobierno.
Nito Biassi, filósofo (Argentina)
Este filósofo argentino considera "muy arriesgado" predecir un final de la globalización con los pocos datos que se tienen hasta el momento sobre el plan de gobierno de Trump.
El proceso de globalización, indica Biassi, "es un proceso económico, cultural y social basado en una unión tecnológica comercial" y "la base social del mundo globalizado es la sociedad de consumo". Teniendo en cuenta todo ello, el filósofo concluye que no ha llegado el fin de la globalización con Trump.
Bassi recuerda que el nuevo mandatario estadounidense ha prometido restaurar las industrias "que se fueron a países donde los costos de producción son más baratos", así como "erradicar los tratados internacionales que no favorezcan a la industria local"; y se pregunta: "¿Eso lo hace antiglobalización?". "No creo", responde.
"Lo que propone Trump no es eliminar la globalización, sino gobernarla", concluye.
Ernesto J. Navarro