A partir de mayo, Japón planea que el portahelicópteros Izumo —su buque de guerra más grande, con 248 metros de eslora y 38 metros de manga— realice una gira de tres meses por el mar de la China Meridional para "probar sus capacidades" en "una misión prolongada", según informa Reuters citando fuentes que conocen el plan.
El mayor portahelicópteros de la Marina japonesa, que se incorporó al servicio hace dos años, atracará en Singapur, Indonesia, Filipinas y Sri Lanka antes de unirse en julio a los ejercicios navales Malabar, que llevarán a cabo Estados Unidos e India en el océano Índico.
El Izumo fue registrado como destructor debido a que la Constitución de Japón pacifista del país prohíbe la adquisición de armas ofensivas. Sin embargo, permite la proyección del poder militar más allá del territorio nipón, ya que transporta hasta nueve helicópteros —de los cuales cinco podrían usar su cubierta de manera simultánea—, combina funciones de portaaviones ligero y buque de asalto anfibio y aloja alrededor de 470 militares.
El mar de China Meridional cuenta con enormes recursos pesqueros y de hidrocarburos y es objeto de una disputa territorial entre China, Malasia, Vietnam, Filipinas y Brunéi, mientras que Japón está involucrado en una disputa separada con los chinos en el mar de la China Oriental.
El aumento de la presencia militar china y su construcción de islas artificiales ha incrementado las preocupaciones de esos países y de EE.UU., que patrulla la zona de manera regular para asegurar la libertad de navegación en la región.