"Yemen es la guerra silenciada por el mundo, la guerra que Occidente se esfuerza en ocultar a base de no informar sobre ella, a base de no mostrar imágenes de lo que allí ocurre, a base de vender la idea de que 'es un tema de ellos', de no permitir que el mundo sepa lo que está ocurriendo. Esa guerra que Occidente ignora en sus telediarios, en las portadas de la prensa más conocida, esa guerra en la que juega a no ser contrincante, pero en la que está metido hasta el cuello, dispuesto a no perder ni un ápice de su poder, ni un petrodólar por la de compra-venta de armas y sus contratos millonarios".
Este silencio es el que llevó a Eva Erill a fundar Solidarios sin Fronteras, la única ONG española que actualmente trabaja en Yemen. El país está inmerso en una guerra devastadora desde marzo de 2015, cuando una coalición de países árabes encabezada por Arabia Saudita comenzó a bombardear a los hutíes para reinstaurar en el poder al presidente derrocado Abd Rabbuh Mansur al Hadi, exiliado en Riad.
Durante estos dos años, los aviones sauditas han bombardeado escuelas, hospitales y mercados, además de mantener un duro bloqueo de ayuda humanitaria. Las cifras son estremecedoras: más de 12.000 civiles fallecidos, tres millones y medio de desplazados internos y un 83% de la población yemení en emergencia humanitaria. Sin embargo, la ONU todavía no ha declarado la hambruna en el país.
RT: ¿Cómo surge la idea de crear una ONG en España que trabaje en Yemen?
E.E.: Llevaba catorce años trabajando en cooperación en diferentes proyectos en Etiopía y otros países. Además, había viajado varias veces a Yemen, eso hizo que conociera a mucha gente. Me pareció un país increíble con gente fantástica. Me enamoró. Cuando empieza la guerra, en marzo de 2015, mis amigos yemeníes empiezan a informarme y a enviarme fotografías sobre lo que estaba sucediendo.
Así, hablando con Faten, que luego se convertiría en la coordinadora del proyecto desde allí, me documenté y descubrí que no había ninguna ONG española trabajando en Yemen. Pensé que podíamos hacerlo nosotras y así nació Solidarios sin Fronteras. Comenzamos a ayudar en abril de ese mismo año y en junio nos constituimos como ONG.
RT: Supongo que no será fácil trabajar en un país con un bloqueo aéreo, marítimo y terrestre.
E.E.: Ese es justo el elemento clave que explica por qué no hay organizaciones trabajando en Yemen y por qué Solidarios Sin Fronteras sí puede estar allí. Las ONG grandes no pueden trabajar en el país porque el bloqueo de puertos y aeropuertos les impide enviar 'containers' con ayuda humanitaria. Ahora mismo, que yo tenga constancia, solo está entrando algún avión de Naciones Unidas con ayuda de Médicos Sin Fronteras (MSF)
Por otro lado, las ONG pequeñas no pueden trabajar en Yemen si no tienen a nadie allí que sea de su total y absoluta confianza, como es mi caso con Faten. En un país que está en guerra, si tú no tienes a alguien de confianza dentro que reciba ese dinero, que es lo único que se puede enviar por culpa del bloqueo, nunca sabrías a dónde va a parar el dinero.
Además, tengamos en cuenta que Yemen ya era el país más pobre de todo oriente próximo antes de la guerra, ya dependía un 90% de las importaciones extranjeras, por lo que el bloqueo directamente está matando de hambre a la población. Se trata de la mayor emergencia humanitaria del mundo.
RT: ¿Qué proyectos estáis llevando a cabo en Yemen?
E.E.: Por un lado, establecemos una caja básica de comida para una familia de unas seis personas durante un mes. Esa caja contiene 15 kilos de harina blanca, 15 kilos de harina roja, 10 kilos de arroz, espaguetis, legumbres, leche en polvo, zumo en polvo, tajín, aceite y 30 huevos, entre otros. Es bastante completa. Cada caja vale 72 euros. Empezamos enviando el dinero para 10-15 cajas al mes y ahora estamos en 100-150 cajas al mes.
Esta forma de trabajar también tiene otra ventaja, que el dinero se queda en el país. Es decir, cuando Faten recibe el dinero compra los alimentos en la economía local, en pequeños supermercados y en algunos sitios donde, a pesar del bloqueo, van llegando algunas cosas. De esta manera, se favorece también la paupérrima economía local.
Al poco tiempo de hacer el reparto de comida, Faten nos dijo que no había agua, un problema que ya existía antes de la guerra, pero que el bloqueo ha acentuado. Primero instalamos dos depósitos de agua de 2.000 litros cada uno en el campo de refugiados de Amram. Ahora ya tenemos tres y estamos a punto de poner el cuarto. Estamos dando 48.000 litros de agua al mes y vamos a pasar a dar 64.000.
Y por último tenemos el proyecto de reconstrucción de casas en la isla yemení de Socotra, que aunque no sufre los bombardeos ha sido azotada por dos huracanes seguidos. De las 50.000 personas que habitan la isla, unas 15.000 se quedaron sin hogar. Hasta ahora, hemos conseguido reconstruir más de 120 casas.
RT: Y todo esto, en un país en guerra. ¿Cuál es la situación actual en Yemen?
E.E.: Uno de los elementos más importantes ahora mismo es que el país no tiene gobierno. Es decir, el gobierno reconocido internacionalmente, que es el que mandó bombardear a su pueblo, está exiliado en Arabia Saudí. Del otro lado están los hutíes, que han formado su propio gobierno y su propio parlamento, en el cual han declarado hace una semana pena de muerte para Hadi, el presidente exiliado, por ordenar bombardear a su pueblo.
Además, Arabia Saudí tiene sus propios intereses, quiere el control de la región y que Irán no pueda tener expansionismo en toda esa zona. Para Arabia Saudí, Yemen siempre ha sido su patio trasero, ha hecho con el país lo que le ha dado la gana. Y luego están los intereses de EE.UU., Gran Bretaña o Francia, que quieren controlar el paso del petróleo. Yemen es muy pobre pero está situado en un lugar muy estratégico.
RT: ¿Consideras que el origen de la guerra es el aspecto religioso?
E.E.: No, no es verdad que se trate de una guerra chiita - sunita. Inicialmente, esto podría tener sentido, pero los que hemos seguido la guerra desde el principio sabemos que no es cierto. Es verdad que Arabia Saudí es sunita y que no quiere que Irán, que es chiita, controle nada en esta región. Pero EE.UU., Francia, Gran Bretaña e Israel no son ni sunitas ni chiitas, lo único que les interesa es el control del petróleo.
Los yemeníes ahora están apoyando al movimiento hutí en masa, porque lo que quieren es que el imperialismo, EE.UU. y Arabia Saudí se vayan del país y dejen de matar a los niños. Los hutíes están teniendo un apoyo popular bestial. La gente no le perdona a Hadi que ordenara bombardear a su pueblo.
RT: ¿Por qué esta guerra está siendo silenciada por los medios de comunicación y por los gobiernos?
E.E.: Es una guerra en la que está metida EE.UU. y media Europa vendiendo armas, empezando por España, que en los últimos dos años ha multiplicado una barbaridad sus ventas y sus ganancias. Las armas que están ahora mismo matando a la población yemení son españolas, francesas, italianas, alemanas, australianas, estadounidenses, británicas, brasileñas… Están todos haciendo negocio con la guerra en Yemen.
Por otro lado, el bloqueo impuesto por Arabia Saudí y EE.UU. también impide la entrada de periodistas al país, por lo que apenas hay información de lo que está sucediendo. Además, a los periodistas yemeníes, que son los que están informando de la guerra, los están matando continuamente. Lo que no sale en la televisión, no existe.
En España, concretamente, Arabia Saudí y EE.UU. son amigos del Gobierno. Las relaciones comerciales con Arabia Saudí vienen del rey Juan Carlos, que ya era amigo del rey saudí. Recientemente, el rey Felipe VI ha ido a vender a Arabia Saudí cinco corbetas que se están fabricando en Cádiz y que se usarán para el bloqueo de los puertos yemeníes; es decir, para impedir la entrada de alimentos.
Incluso el Congreso español aprobó hace unas semanas que las relaciones en materia de defensa entre España y Arabia Saudí son secretas. Votar eso en un congreso es dar vía libre a las relaciones con el país más genocida del mundo.
RT: ¿Ha acaparo Siria todas las miradas de la prensa internacional dejando a un lado otras guerras?
E.E.: Ha sucedido algo muy perverso. Parece que los refugiados o las guerras sean solo en Siria, y hay muchos más países que están silenciados. Los refugiados no son solo los que están llegando a Europa. Hay millones de personas que tienen que huir de sus casas por las bombas y, como no llegan a Europa porque sus recursos no se lo permiten, no existen.
Un yemení no puede permitirse pagar a mafias para ir a Europa. Su única salida son los países de la zona, que también están en una situación humanitaria desastrosa. Yemen, con un 83% de personas en emergencia humanitaria, se ha convertido en el país donde hay mayor número de personas que no tienen comida, agua o medicinas. Y, sin embargo, no existe para nosotros.
RT: ¿Cómo es posible que la ONU todavía no haya declarado la hambruna en Yemen?
E.E.: Porque la ONU es una organización de EE.UU. El delegado de los derechos humanos de la ONU es de Arabia Saudí. Fue elegido pese a las protestas de todas las ONG. El pasado mes de junio, la ONU publicó un informe en el que incluyó a Arabia Saudí como país que mataba niños en Yemen. A los dos días tuvo que retirarlo del informe e incluso Ban Ki Moon aseguró que había recibido amenazas con quitarle todos los petrodólares que financiaban proyectos humanitarios.
Además, no declara la hambruna porque implicaría que los países que forman parte de la ONU se vean obligados a dar un dinero, que no están dando, y la ONU se vería obligada a hacer muchas acciones ,que no está haciendo. Y cuando hablo de la ONU, me refiero también a sus organismos satélites, la Acnur y Unicef. Es brutal que digan que cada 10 minutos muere un niño en Yemen y luego no declaren la hambruna.
RT: El caldo de cultivo perfecto para los grupos radicales, ¿habéis notado un incremento de su presencia?
E.E.: Claro que están aumentando los grupos radicales. El Estado Islámico ni siquiera existía en Yemen antes de la Guerra. Al Qaeda sí. Pero es que a estos grupos los están financiando Arabia Saudí y Catar. Las zonas yemeníes en manos de Al Qaeda, por ejemplo, no han sido bombardeadas en ningún momento. La lucha de EE.UU. contra el terrorismo es tan falsa. Dicen que van a acabar con los terroristas en Yemen, pero lo que están haciendo es matar a la población civil.
RT: ¿Qué futuro les espera a los yemeníes?
E.E.: Un futuro muy negro. La última noticia es que EE.UU. va a ampliar sus operaciones militares en Yemen. Obama, el famoso Nobel de la Paz, tenía el récord de drones en Afganistán y Yemen, de gente asesinada con drones. Donald Trump en estos meses ya ha superado el número de drones que había utilizado mensualmente Obama. Es decir, tenemos la misma política internacional, pero en manos de un demente.
Sin embargo, los yemeníes no se van a rendir. Son un pueblo como el afgano, muy duro, muy fuerte, acostumbrado a las guerras. Además, el pueblo se está uniendo cada vez más a los hutíes, porque quieren que todos se vayan del país.
RT: Ya por último, para aquellos que nos estén leyendo, ¿cómo pueden colaborar la gente con vuestro proyecto?
E.E.: Es importante decir que no tenemos ninguna subvención pública ni recibimos ayuda de empresas. Todo lo que conseguimos es a través de donaciones privadas. Pequeños granos de arena. Así, el proyecto de la comida lo financiado a través de crowfunding en una página que se llama 'migranodearena.org', donde cada persona dona lo que considere oportuno. Por ejemplo, en estos dos últimos meses hemos enviado 7.200 euros de donantes solo para comida.
Por otro lado, el proyecto del agua lo realizamos a través de una la plataforma 'Teaming', donde cada persona que se apunta da un euro al mes, no pueden dar más, solo un euro. Con ese dinero pagamos el agua mensual y ahorramos dinero para poner más depósitos en Yemen. Ahora mismo somos 666 personas las que estamos apuntadas. Y por último, hay gente que nos ofrece una cuota al mes fija con el dinero que ellos quieren donar. Pero de momento, son muy pocos, tenemos a unas 15 personas que nos ayudan a través de este sistema.
Puedes consultar más información en Solidarios sin Fronteras y contribuir con donaciones en migranodearena.org
María Jesús Vigo Pastur