La misteriosa muerte de un adolescente causa indignación en Filipinas

La Policía filipina se ve bajo presión social para explicar el misterioso asesinato de un estudiante de secundaria que se ha convertido en la última víctima de la despiadada guerra del presidente Rodrigo Duterte contra las drogas, informa 'Al Jazeera'.

Kian Loyd Delos Santos, de 17 años, murió el miércoles por la noche en la capital filipina, Manila. Según el informe policial, Delos Santos empezó a correr cuando vio a los oficiales acercándose a él. Luego sacó una pistola y abrió fuego contra los agentes, que respondieron con los disparos que acabaron con la vida del joven.

Sin embargo, los testigos relatan una versión totalmente diferente de los hechos. Los que presenciaron la muerte del adolescente afirmaron a los medios locales que el joven estaba desarmado. Según ellos, Delos Santos fue rodeado por los policías, que le obligaron a sostener un arma, dispararla y correr.

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Una grabación de las cámaras de seguridad da más credibilidad a la segunda versión. El video captado en el barrio de Caloocan muestra como dos hombres llevan a Delos Santos al lugar donde su cuerpo fue encontrado más tarde. Este detalle puso en duda el informe oficial.

"No permitiré que ningún agente de Policía mate a un niño de 17 sin motivo alguno… ¿Son realmente tan crueles?", dijo a periodistas el jefe de la Policía nacional filipina, Ronald dela Rosa. "Lo investigaremos, os lo aseguro", añadió.

La reacción a la muerte del joven refleja la indignación que causa la impunidad policial en Filipinas. El presidente del país, Rodrigo Duterte, encabeza desde hace 14 meses una sangrienta lucha sin precedentes contra los traficantes de drogas. Esta política ha dejado miles de personas muertas y ha generado acusaciones de crímenes de lesa humanidad de parte de grupos de defensa derechos humanos, que denuncian numerosos abusos policiales.