EE.UU. estudia dotarse de armas nucleares más pequeñas y tácticas para contener a otras potencias
La Administración del presidente de EE.UU., Donald Trump, estaría evaluando la posibilidad de crear un nuevo tipo de armas nucleares, según fuentes de la revista 'Politico'.
El proyecto, cuyo fin sería crear un arma de disuasión ante posibles rivales de Washington en el ámbito nuclear, como Rusia o Corea del Norte, correría a cargo de un equipo especial formado por el mandatario para revisar el arsenal nuclear estadounidense.
En concreto, se trataría de "armas nucleares más tácticas y de menor tamaño, que podrían causar menos daños que las bombas termonucleares tradicionales". Algunos críticos sostienen que el proyecto —más allá de que las arnas sean diseñadas para ser portadas por misiles, por la aviación o por las Fuerzas Especiales— aumentaría la posibilidad del uso de armas nucleares.
Los encargados de la Revisión de la Postura Nuclear autorizada por Trump durante sus primeros días como presidente de EE.UU. "tienen que preguntar de forma convincente a los militares qué necesitan para la disuasión del enemigo", ha declarado una de las fuentes del medio, que también se pregunta si todas las armas ya existentes "van a resultar útiles en todos los escenarios que vemos".
Algunas armas fabricadas en la época de la Guerra Fría son adecuadas para ser usadas en el marco de la nueva iniciativa o podrían ser modificadas de tal forma que su explosión fuera menos destructiva, agrega la revista. Se espera que el Senado norteamericano discuta acerca de estas opciones nucleares en los próximos días.
La polémica está servida
Por su parte, varios expertos opinan que el proyecto generará una gran polémica, teniendo en cuenta las críticas que sigue recibiendo Donald Trump por sus declaraciones sobre un posible ataque nuclear contra Corea del Norte, país que sigue realizando pruebas de armas nucleares pese a la condena de la comunidad internacional y con el que Washington mantiene un rifirrafe verbal desde hace varias semanas.
"Bajo las condiciones actuales, si EE.UU. realiza una prueba de un arma nuclear de baja potencia, otros [países] —Rusia, Irán, China, Pakistán, la India— también podrían realizar pruebas propias", advierte Philip Coyle, miembro del consejo del Centro del Control de Armas y de la No Proliferación. "Está claro que esto daría a Corea del Norte un motivo para llevar a cabo sus pruebas cuantas veces quiera", añade.
Asimismo, Alexandra Bell, directora superior a cargo de las políticas de este mismo centro, destaca que "resulta difícil imaginarse bajo qué circunstancias necesitaríamos recurrir a una opción militar entre nuestras formidables capacidades convencionales y nuestras capacidades de armas nucleares de baja potencia". "Los legisladores deberían de mostrarse cautelosos ante cualquier intento de reducir el umbral del uso de armas nucleares, pues no existe algo así como una guerra nuclear menor", subraya.
En cuanto a EE.UU., la aprobación de este proyecto "torpedearía nuestra habilidad de prevenir que otras naciones desarrollen o mejoren sus propias capacidades nucleares", y también "ahondaría en la división entre EE.UU. y otros países", tal y como lo ha expresado Steven Andreasen, que era director de defensa y control de armas del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca bajo la Administración de Bill Clinton.
- El pasado 3 de septiembre Pionyang llevó a cabo su sexta prueba nuclear, esta vez con una bomba de hidrógeno.
- Este nuevo paso dado por el líder norcoreano, Kim Jong-un, ha sido duramente criticado por la comunidad internacional y, en particular, ha sembrado la preocupación en los países asiáticos.