Cómo EE.UU. fuerza a Irán para que protagonice la próxima crisis nuclear
Integrantes de la Administración y "una 'bandada de halcones'" de Estados Unidos parecen decididos a "sabotear" el acuerdo nuclear con Irán y esa política puede provocar que Teherán protagonice "la próxima crisis nuclear", sostiene el especialista en seguridad y defensa Ted Galen Carpenter en un artículo para 'The National Interest'.
A pesar de que el propio presidente de EE.UU., Donald Trump, "admitió a regañadientes" que el país asiático cumple con los términos explícitos del acuerdo, este analista recuerda que se quejó de que los líderes iraníes violaban "el espíritu" del documento.
Además, el discurso que pronunció el pasado 5 de septiembre la embajadora estadounidense ante la ONU, Nikki Haley, contenía "multitud de distorsiones" que parecían diseñadas para "establecer una base"que permitiera al Gobierno estadounidense repudiar el acuerdo e, incluso, "defender una guerra contra Irán", según Carpenter.
Argumentos de los 'halcones'
Este investigador recuerda que cada vez resulta más popular entre los defensores de una política belicosa hacia Teherán destacar que el comportamiento de Corea del Norte es "un precursor" de las circunstancias a las que se enfrentará EE.UU. si Washington "no endurece su enfoque" respecto a Irán.
Así, algunos de esos 'halcones' critican abiertamente el tratado que la Administración Clinton firmó con Corea del Norte en 1994 porque estiman que permitió a Pionyang "burlar las restricciones en su programa nuclear", con lo cual estiman que los líderes estadounidenses no deben cometer el mismo error con Teherán.
Esos estadounidenses indican que Teherán observa con atención cómo afronta Washington "la entrada desafiante" de Pionyang en "el club mundial de armas nucleares" y, si se echa para atrás, la república islámica perseguirá de manera activa "la misma ambición", sin importarle ningún documento.
Para reforzar su argumento, esos críticos norteamericanos argumentan que Irán y Corea del Norte cooperan estrechamente en materia nuclear y en tecnología de misiles. John Bolton, un antiguo embajador de EE.UU. ante la ONU, llegó a afirmar que si Pionyang mantiene su arsenal de armas nucleares y desarrolla misiles balísticos fiables, Teherán podría tener las mismas capacidades "al día siguiente" tan solo con "extender un cheque" a Kim Jong-un.
Lección equivocada
Sin embargo, Ted Galen Carpenter destaca que utilizar el comportamiento de Corea del Norte como excusa para romper el acuerdo nuclear con Irán —por no hablar de una acción militar que "claramente quieren" algunos partidarios de la línea dura— es, en el mejor de los casos, una reacción "peligrosamente simplista", debido a que la supresión del acuerdo con Teherán aumentaría las tensiones "en todo Oriente Medio".
Además, este experto señala que los 'halcones' "aprendieron la lección equivocada" del comportamiento de Pionyang pues, "dado el modo en que Washington ha tratado a adversarios no nucleares" como Serbia, Irak y Libia, el deseo de Corea del Norte de tener una disuasión nuclear "no es precisamente irracional" ya que, "en gran medida, EE.UU. ha creado ese problema".
Por qué es un error aplicar la misma política
Ted Galen Carpenter predice que, aunque EE.UU. mantenga su "política equivocada y estéril" de aislar a Pionyang, las consecuencias adversas de adoptar la misma táctica con Teherán "serían mucho peores".
- Corea del Norte es "un pequeño país desagradable", pero tiene "poca importancia" más allá de su entorno.
- En cambio, Irán es "un importante actor diplomático, militar y económico en todo Oriente Medio, incluso en el centro y suroeste de Asia". Además, como principal representante de la rama chiita del islam, ejerce una influencia considerable en países como Irak, Líbano, Siria, Baréin y Yemen.
Según Carpenter, intentar aislar a Irán siempre será "un ejercicio de inutilidad", mientras que atacar a ese país "desencadenaría otra desastrosa guerra en Oriente Medio", razón por la que el rumbo con el que "parece flirtear" la Administración Trump "debe evitarse a toda costa". El inquilino de la Casa Blanca "no debe escuchar los cantos de sirena de los 'halcones' imprudentes"que se han equivocado en "tantos temas diferentes", concluye el experto.