Rusia no participará en ninguna carrera armamentista "agotadora" y "sin sentido", y el gasto militar del país disminuirá gradualmente ya que Moscú no busca convertirse en el "gendarme mundial", afirmó el presidente de esta nación, Vladímir Putin.
"No necesitamos un número infinito de bases en todo el mundo y no vamos a jugar el papel del gendarme mundial", señaló el mandatario este viernes durante una reunión anual del colegio del Ministerio de Defensa, según recoge Interfax.
Putin agregó que Moscú se apegará a "decisiones inteligentes" para fortalecer sus capacidades defensivas, y que las piedras angulares de la doctrina militar del país deben ser "inteligencia, astucia, disciplina y organización".
Según el presidente, lo último que Rusia necesita es una carrera armamentista que "drene" su economía, y Moscú no quiere eso "en ningún escenario". Sin embargo, el líder ruso hizo hincapié en que las capacidades de defensa de su país "definitivamente e incondicionalmente" serán aseguradas.
Prioridades de defensa
Entretanto, el desarrollo de la tríada nuclear seguirá siendo una prioridad en la política rusa en materia de defensa. Actualmente, las armas modernas constituyen el 79% del arsenal nuclear ruso, un porcentaje que deberá aumentar hasta el 90% para 2021, ha planteado el presidente.
Rusia enfatizará en su desarrollo militar el suministro a las tropas de armamento de alta precisión, los sistemas de ataque no tripulados y la protección individual de su personal. Además, las fuerzas terrestres deberán "superar con seguridad los sistemas de defensa antimisiles disponibles e incluso futuros" de otros países.