El representante permanente de Rusia ante la ONU, Vasili Nebenzia, ha asegurado que la prioridad en la situación actual es evitar la amenaza de una situación de guerra en Siria.
"Rusia espera que la situación siria no llegue a un punto de no retorno y que Estados Unidos y sus aliados se abstengan de realizar acciones unilaterales", ha afirmado este diplomático ruso tras las consultas a puerta cerrada sobre Siria que han tenido lugar en el Consejo de Seguridad de la ONU.
Nebenzia ha calificado de "inconcebible" la posibilidad de que Washington pueda atacar objetivos en Siria donde se encuentran tropas rusas.
Asimismo, este alto funcionario ruso ha anunciado que las amenazas respecto a implementar medidas de fuerza en el país árabe violan la Carta de Naciones Unidas, así que ha llamado a celebrar una reunión abierta sobre Siria en la que participe el secretario general de la ONU, António Guterres.
Vasili Nebenzia ha manifestado que en Siria no se puede descartar ninguna opción debido al tono "bélico" de las últimas "declaraciones de Washington": "Saben que estamos [en Siria] y espero que el diálogo se lleve a cabo a través de los canales apropiados para prevenir cualquier desarrollo peligroso de los acontecimientos", ha concluido el embajador de Rusia ante la ONU.
Este martes, Nebenzia lamentó durante la sesión del Consejo de Seguridad que a Washington no le importe comprobar si en realidad hubo un ataque químico en Duma, sino que solo busca pretextos para atacar al país árabe. El representante calificó como "una locura" que bastaran informaciones no verificadas de parte de los "provocadores" de los Cascos Blancos para asumir que el Gobierno sirio utilizó armas químicas contra su pueblo.
Por su parte, la portavoz rusa de Exteriores, María Zajárova, afirmó que su país no quiere generar una escalada de tensión en torno a Siria y espera que los socios occidentales vuelvan al marco legal. "Las declaraciones militaristas" provenientes de países occidentales "amenazan con una escalada extremadamente peligrosa", advirtió la portavoz rusa de Exteriores. Según Zajárova, "Occidente lo hizo todo para crear la sensación de una guerra próxima en relación con la situación en Siria".