En Tailandia, un miembro del equipo de socorristas que trabaja en el rescate de los niños atrapados en una cueva subterránea, ha muerto. El socorrista tailandés Saman Kunan, de 38 años, falleció después de caer inconsciente durante la inmersión de regreso de la cueva donde los niños y su entrenador esperan a ser rescatados.
El exbuzo de la Marina tailandesa, que trabajaba como voluntario, estaba volviendo a la superficie después de colocar bombonas de oxígeno en la red subterránea de la cueva cuando sufrió asfixia.
Su cuerpo ha sido enviado al aeropuerto Suvarnabhumi de Bangkok y será trasladado a la ciudad natal del buzo, en la provincia oriental de Roi Et. Los gastos del funeral correrán a cargo del rey de Tailandia.
El 2 de julio, 12 niños y su entrenador fueron hallados vivos 10 días después de que desaparecieran en la cueva de Tham Luang, en el norte de Tailandia. La operación de rescate aún está lejos de concluir con éxito. Inicialmente se advirtió que los trabajos de rescate podrían durar varios meses, pero dado que esta semana se prevén lluvias monzónicas en la zona, es probable que se lleve a cabo un intento de rescate en los próximos días.