Los 12 niños tailandeses y su entrenador atrapados en una cueva en Tailandia han logrado enviar por primera vez cartas a sus familiares.
Las fotos de los mensajes escritos a mano han sido publicadas en la cuenta oficial de la Armada de Tailandia.
"Estoy bien. Puede que el aire sea un poco escaso, pero no se preocupen. Y no os olvidéis de mi fiesta de cumpleaños", escribió Dom.
"No se preocupen por nosotros ahora. Los extraño a todos. Quiero volver pronto", dijo, a su vez, Adul.
"No se preocupen por mí. Los extraño a todos ustedes: abuelo, tía, mamá, papá y todos. Los quiero a todos. Me va bien aquí. Los hermanos de la Armada me cuidan mucho. Los amo a todos", escribe un niño apodado 'Mik'.
"Los amo, papá y mamá. No se preocupen por mí, ahora estoy seguro. Los amo a todos", dice el mensaje de Pong.
"Los amo, papá y mamá, y también a mi hermanito Doi. Cuando salga, llévenme a comer cerdo. Los amo, mamá, papá y hermanito", escribió Nick.
"Los cuidaré lo mejor que pueda"
Entre las cartas se encuentra también el mensaje del entrenador de fútbol Ekkapol Chantawong, de 25 años, quien ofrece sus disculpas a los padres de los niños.
"Todos los niños están bien. Están bien atendidos por el equipo de rescate. Prometo que los cuidaré lo mejor que pueda. Gracias por todo el apoyo y acepten mis disculpas", escribió, añadiendo también un par de palabras para sus seres queridos: "Querida tía y abuelita, estoy bien. No se preocupen demasiado por mí. Por favor, cuídense".
"Los niños dijeron que no se preocuparan por ellos. Todos son fuertes. Dijeron que querían comer muchas cosas. Quieren ir a casa inmediatamente en cuanto salgan. Maestros, no les pongáis demasiados deberes", escribió uno de los buzos que participó en la misión de rescate.
Operación de rescate
El 23 de junio, el grupo de adolescentes de entre 11 y 16 años y su entrenador de fútbol de 25 años desaparecieron durante una excursión por la popular red de cuevas de Tham Luang. Debido a las lluvias torrenciales, el agua empezó a acumularse rápidamente en la cueva y los niños se adentraron cada vez más en la gruta, hasta quedar bloqueados a cuatro kilómetros de la entrada. La desaparición de los niños y su entrenador fue seguida por una gran operación de búsqueda y rescate.
El 2 de julio, doce niños y su entrenador de fútbol fueron hallados con vida diez días después de que desaparecieran en la cueva. La operación de rescate aún está lejos de concluir con éxito. Inicialmente se advirtió que los trabajos de rescate podrían durar varios meses, pero dado que esta semana se prevén lluvias monzónicas en la zona, es probable que se lleve a cabo un intento de rescate en los próximos días.
Para facilitar la salida de los niños, los especialistas están drenando el agua de la cueva. No obstante, su nivel desciende muy lentamente, un centímetro cada hora o menos. Las autoridades tailandesas también han intentado perforar agujeros en la cueva para ayudar a drenar más agua, pero el grosor de la roca ha dificultado estos esfuerzos.