¿Provocaron los astronautas estadounidenses la fuga de aire en la sección rusa de la EEI?
Una comisión especial de la agencia espacial rusa Roscosmos investigará si los astronautas estadounidenses provocaron deliberadamente la fuga de aire en la nave Soyuz MS-09, que se encuentra acoplada a la Estación Espacial Internacional (EEI), con el fin de llevar a la Tierra a uno de sus compañeros para recibir tratamiento médico. Así lo informa el periódico Kommersant citando a sus fuentes en Roscosmos.
El incidente ocurrió en la madrugada del 30 de agosto, cuando la presión en la Soyuz MS-09 empezó a bajar. Según se descubrió, la fuga fue provocada por una microgrieta de 1,5 milímetros. La tarde de ese mismo día, los cosmonautas rusos sellaron el agujero y restablecieron la hermeticidad.
Entre las posibles versiones sobre las causas de lo ocurrido, se mencionó el impacto de un micrometeorito o un fallo de producción. El 30 de agosto, los cosmonautas rusos informaron al Centro Ruso de Control de Misiones (TsUP) que cerca de la microgrieta, que parecía ser resultado de la acción de un taladro, se hallaron restos de pegamento.
Según una de las fuentes, que participa en la investigación de las causas del incidente, los especialistas no consideran probable la hipótesis de un fallo de producción o de una negligencia en el momento del ensamblaje de la aeronave. Basándose en la documentación de los reportes de los empleados de RKK Energuia y de las fotos enviadas por los cosmonautas rusos, han establecido que el agujero apareció en el espacio exterior, después de que la aeronave se acoplara a la EEI. Al estudiar la naturaleza de los daños, los expertos han llegado a la conclusión de que el orificio no se formó en el primer intento, ya que a su alrededor aparecen varios puntos provocados, al parecer, por un taladro.
"El acceso a nuestra aeronave es posible solo con el permiso de nuestro comandante, pero no podemos excluir un acceso no sancionado de los estadounidenses", ha dicho la fuente del periódico ruso.
La versión prioritaria examinada por la comisión de Roscosmos estará relacionada con una acción voluntaria por parte de los astronautas estadounidenses, que habrían supuestamente intentado provocar el envío anticipado de la nave a la Tierra por la enfermedad de un miembro de la tripulación, ha afirmado un alto cargo anónimo consultado por Kommersant. Roscosmos ya ha solicitado ayuda a la NASA en la investigación, pidiéndole las copias de los vídeos de las cámaras de vigilancia, así como los datos médicos de sus astronautras.
"Es probable que este tema sea abordado en la reunión entre Dmitri Rogozin [jefe de Roscosmos] y el jefe de la NASA, Jim Bridenstine, que está prevista que se celebre en el cosmódromo de Baikonur el 11 de octubre", ha afirmado una fuente del periódico.