El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, ha manifestado este 14 de febrero en Sochi (Krasnodar, Rusia) que "todo el mundo sabe" que Estados Unidos "presiona mucho" para que su país no compre los sistemas de misiles S-400, informa RIA Novosti.
Ankara y Moscú acordaron esa adquisición en abril de 2017, con vistas a que los turcos sustiyan los sistemas Patriot estadounidenses. Ibrahim Kalin, portavoz del mandatario de Turquía, explicó entonces que su país se basaba en tres criterios: "el precio, la transferencia de tecnología y el plazo de entrega''.
Washington que trató de revertir la situación cuando el Senado de EE.UU. canceló la participación de Turquía en el programa para construir los cazas F-35 a mediados de 2018, aunque meses después el secretario general de OTAN, Jens Stoltenberg, admitió que la operación para hacerse con los sistemas S-400 se trata de "una decisión nacional".