Visto para sentencia el juicio contra el proceso independentista catalán
Tras 52 intensas sesiones, con las declaraciones de más de 400 testigos, la intervención de varios peritos y una minuciosa revisión de pruebas, el juicio a los líderes independentistas catalanes en el Tribunal Supremo español llega este miércoles a su fin. Han sido cuatro meses en los que se han juzgado los actos que desembocaron en el referéndum soberanista ilegal del 1 de octubre de 2017, y también la declaración unilateral de independencia que se llevó a cabo en el Parlamento de Cataluña el 27 de ese mismo mes.
En esta última sesión, la sala escuchará las conclusiones de los abogados defensores y la última palabra de los acusados, cada uno de los cuales dispondrá de 15 minutos a tal efecto. Después, con toda probabilidad y salvo sorpresa de última hora, el juicio quedará visto para sentencia.
No existe a un límite de tiempo específico para la publicación de la sentencia. Esta podría producirse en unas semanas o en unos meses. En cualquier caso, lo más probable es que el tribunal se pronuncie después del verano.
El punto de vista del independentismo
Según explica el periodista Roger Pi de Cabanyes, "el independentismo cree que ha sido víctima de una operación de Estado, por parte de un poder político que no estaba preparado para asumir que en Cataluña hubiera un referéndum de independencia y se pudiera votar esta opción".
En ese sentido, lo que habrían hecho los políticos separatistas con su declaración unilateral de independencia sería equiparable, siempre según el relato independentista, a "una falta táctica en un partido de fútbol" para forzar, en este caso, una negociación.
Pi de Cabanyes explica que desde la óptica política del secesionismo catalán, "las acusaciones de rebelión" sostenidas desde la Fiscalía, habrían sido "la excusa para encarcelar a los líderes independentistas, evitar la investidura de Puigdemont, suspender la autonomía de Cataluña y detener así el proceso".
Un juicio "ejemplar" en el que "ha reinado la transparencia"
Para Guillermo Rocafort, profesor de Derecho Constitucional de la Universidad Europea Madrid, en el juicio contra el independentismo catalán "ha reinado la transparencia". Este experto docente estima que, ante las eventuales dudas al respecto dentro y fuera de España, "el juez Marchena tomó la acertada decisión de retransmitir en directo este juicio", para demostrar públicamente que "efectivamente en España hay una justicia ejemplar en cuanto a transparencia".
Frente a las quejas de los abogados defensores de los independentistas acerca de una supuesta ausencia de garantías procesales, Rocafort considera que las defensas, precisamente, "han cometido un error sustancial, que es politizar este asunto, sacándolo del marco estrictamente jurídico-penal para hacer, en muchos casos, alegatos políticos".
"Los independentistas catalanes –continúa Rocafort– siempre han intentado internacionalizar esta cuestión, acudiendo tribunales supranacionales como el de Estrasburgo". Sin embargo el profesor señala que "el Tribunal Supremo está intentando, con mucha seriedad, que no haya ningún resquicio que permita que la Justicia española y el Estado en su conjunto queden en evidencia con una sentencia revocatoria por parte del Tribunal de Derechos Humanos".
¿Quiénes son los acusados?
En el banquillo se han sentado 12 acusados en total. Nueve de ellos se encuentran en prisión preventiva:
- Oriol Junqueras, exvicepresidente de la Generalitat de Cataluña.
- Carme Forcadell, expresidenta del Parlamento de Cataluña.
- Joaquim Forn, exconsejero de Interior.
- Josep Rull, exconsejero de Territorio y Sostenibilidad.
- Jordi Turull, exconsejero de Presidencia.
- Raül Romeva, exconsejero de Asuntos Exteriores.
- Dolors Bassa, exconsejera de Trabajo.
- Jordi Sànchez, expresidente de la Asamblea Nacional Catalana (ANC).
- Jordi Cuixart, expresidente de la asociación Ómnium Cultural.
Los otros tres acusados, que esperarán la sentencia en libertad bajo fianza son:
- Carles Mundó, exconsejero de Justicia.
- Meritxell Borrás, exconsejera de Gobernación.
- Carles Vila, exconsejero de Empresa y Conocimiento.
Además de los acusados que se presentaron en este juicio, hay otros siete que no se personaron porque se encuentran huidos de la justicia en el extranjero:
- Carles Puigdemont, expresidente de la Generalitat.
- Antoni Comín, exconsejero de Sanidad.
- Meritxell Serret, exconsejera de Agricultura.
- Clara Ponsatí, exconsejera de Educación.
- Lluis Puig, exconsejero de Cultura.
- Marta Rovira, líder de Esquerra Republicana.
- Anna Gabriel, exdiputada de la CUP.
¿De qué delitos se les acusa?
Todos líderes que están ahora encarcelados han sido juzgados por rebelión y sedición. Algunos de ellos –los que formaban parte del Ejecutivo catalán en el momento de los hechos juzgados (Junqueras, Forn, Rull, Turull, Romeva y Bassa)– , además, enfrentan cargos por malversación de fondos.
Por su parte, los exconsejeros Mundó, Borrás y Vila están acusados exclusivamente de malversación de fondos y desobediencia.
¿A qué penas se enfrentan?
Al juicio han concurrido tres acusaciones diferentes: la Fiscalía del Estado, la Abogacía del Estado y la acusación popular ejercida por el partido ultraderechista Vox.
Para los acusados de rebelión y sedición, la Fiscalía solicita penas de entre 16 y 25 años, siendo esta última, la más alta, para el exvicepresidente Oriol Junqueras. La Abogacía del Estado, por su parte, pide entre 8 y 12 años de cárcel para este grupo de acusados. Las penas reclamadas desde la acusación particular son notablemente más altas para todo ellos, y van desde los 62 hasta los 74 años.
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