"Tienes una mente racista en tu cabeza": Ocasio-Cortez vuelve a acusar a Trump de xenofobia
La congresista demócrata estadounidense Alexandria Ocasio-Cortez retomó este martes el cruce de acusaciones con el presidente Donald Trump, luego de que el mandatario asegurara que "no tiene un hueso racista" en su cuerpo, en el marco de una serie de ataques hacia ella y otras tres legisladoras progresistas, a quienes instó a "regresar a sus países de origen".
"Tiene razón, señor presidente: no tiene un hueso racista en su cuerpo. Tiene una mente racista en su cabeza y un corazón racista en su pecho", escribió Ocasio-Cortez en su cuenta de Twitter.
Y añadió: "Es por eso que viola los derechos de los niños y le dice a la congresista que representa a su condado que regrese a su país".
You’re right, Mr. President - you don’t have a racist bone in your body.You have a racist mind in your head, and a racist heart in your chest.That’s why you violate the rights of children and tell the Congresswoman who represents your home borough, to “go back to my country.” https://t.co/adlCUO7r0v
— Alexandria Ocasio-Cortez (@AOC) July 16, 2019
La representante del 14º distrito de Nueva York realizó estas declaraciones horas después de haber ofrecido una conferencia de prensa junto a sus colegas demócratas Rashida Tlaib, Ilhan Omar y Ayanna Pressley, quienes consideraron "xenófobos" los dichos recientes de Trump. El jefe de Estado había señalado que las legisladoras provienen de "los peores países", que están "totalmente destruidos e infestados por el crimen", y cuyos gobiernos "son una catástrofe completa y total".
La congresista estadounidense Alexandria Ocasio-Cortez respondió a los comentarios de Trump sobre que ella y otras tres congresistas “deberían regresar a sus países” pic.twitter.com/dDN5sivR58
— RT en Español (@ActualidadRT) 16 de julio de 2019
Lo cierto es que, de las cuatro congresistas, solo una, Omar, nació en el extranjero. Su familia se estableció en EE.UU en 1997, procedente de Somalia, tras huir de una guerra civil.
Más allá de la polémica, el cruce de acusaciones se da en el marco de la crisis migratoria que afronta la Casa Blanca. Por eso, para las legisladoras demócratas, los dichos de Trump forman parte de una maniobra de "distracción", que busca correr las miradas de la comunidad en torno a las deportaciones y el trato a los migrantes en la frontera.