Se conoce "cómo fue la operación del proceso de desaparición" de los 43 estudiantes de Ayotzinapa
El subsecretario de Derechos Humanos de México, Alejandro Encinas, dio a conocer nuevos avances de la investigación por la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa en 2014. El funcionario afirmó este sábado que ahora se conoce "cómo se comportaron los grupos delictivos esa noche y cómo fue la operación del proceso de desaparición de los estudiantes".
En menos de seis meses, las autoridades actuales han revisado más de 84 millones de llamadas telefónicas de los seis primeros días después de la tragedia, que han permitido arrojar nuevos resultados. "Eso nos permite contar con elementos muy claros para desmentir aquellas versiones que señalaban que había habido comunicación de los estudiantes con los policías", agregó Encinas.
Lo que suceda con la Comisión para la Verdad y el Acceso a la Justicia para el caso Ayotiznapa, es el punto de partida para esclarecer las violaciones a los derechos humanos en todo el país https://t.co/WVHP7OkPbz
— Alejandro Encinas (@A_Encinas_R) 11 августа 2019 г.
El representante del Gobierno informó que todos los oficiales del 27º Batallón de Infantería de Iguala que estuvieron en la zona el día de los hechos están a disposición de la Fiscalía Especial y de la Comisión de la Verdad con el objetivo de rendir declaraciones.
"Tenemos todos los expedientes y bitácoras de los movimientos de ese personal que durante años estuvieron negando, incluso del personal en retiro que estuvo al frente del batallón", manifestó el subsecretario.
Responsabilidad de las autoridades
Además, Encinas indicó no se descarta ninguna de las líneas de investigación, tras anunciar que cuentan con mucha información de testigos y de personas anónimas. Los datos permitirán continuar con la búsqueda y "deslindar responsabilidades para que aquellas autoridades que actuaron con negligencia, omisión o dolo, sean castigadas", puntualizó.
El funcionario explicó que ante la eventual siembra de pruebas se está revisando lo que pasó en el basurero de Cocula, donde se supone que los jóvenes fueron incinerados y posteriormente arrojados al río San Juan, según las versión que manejó el Gobierno de Enrique Peña Nieto.
En este sentido, ratificó la voluntad del actual presidente para avanzar en el esclarecimiento y la "solución definitiva" del caso y "conocer la verdad".