China habría ofrecido una concesión a EE.UU. antes de sentarse de nuevo a la mesa de negociaciones

Los funcionarios de Pekín esta semana ofrecieron por teléfono a sus homólogos de Washington comprar una cantidad modesta de productos agrícolas de su país, según fuentes familiarizadas con el asunto citadas por Politico.

De acuerdo con el medio estadounidense, la oferta podría depender de que EE.UU. alivie las restricciones impuestas a la exportación del gigante tecnológico Huawei y retrase la escalada arancelaria del próximo 1 de octubre, que se aplicará a aproximadamente 250.000 millones de dólares en bienes.

Asimismo, Politico indica que las fuentes señalan que en función de cómo avancen las negociaciones, el inquilino de la Casa Blanca, Donald Trump, también contempla la opción de retrasar otra ronda de aranceles que tiene previsto imponer a partir del próximo 15 de diciembre a casi todas las importaciones restantes provenientes de China, incluidos ordenadores portátiles, teléfonos y otros bienes.

Las negociaciones "se van a calentar"

Una de las personas consultadas en relación con el tema también reveló que donantes políticos y ejecutivos de grandes compañías como Walmart trataron de persuadir a Trump de que retire su ronda de aranceles de diciembre, alegando que esta medida perjudicaría gravemente a los consumidores.

El asesor económico de la Casa Blanca, Larry Kudlow, dijo este viernes que las negociaciones "se van a calentar" cuando los funcionarios chinos lleguen a Washington en las próximas semanas. No obstante, ambos países esperan que haya un "progreso significativo".

Está previsto que los funcionarios de ambas potencias conversen a mediados de este mes para preparar una reunión de altos funcionarios a principios de octubre. "No quiero predecir nada. Solo digo que es bueno que vengan aquí y que los ánimos están más tranquilos ahora", detalló Kudlow, quien también informó que la llamada que mantuvo con el viceprimer ministro chino Liu He "estuvo muy bien".

Continúa la guerra comercial

China protesta ante EE.UU. por la introducción de aranceles adicionales

El pasado 23 de agosto, Trump anunció que EE.UU. gravaría importaciones chinas por valor de 300.000 millones de dólares con un 15 %, en vez de 10 %, desde el 1 de septiembre. Además, a partir del 1 de octubre los aranceles a las mercancías de ese país asiático, por valor de 250.000 millones de dólares, aumentarán del 25 % al 30 %.

De esa manera respondía EE.UU. a las tarifas adicionales a las importaciones estadounidenses que anunció Pekín. El Ministerio de Comercio de China informó que establecerá diversos aranceles a bienes norteamericanos —de 5 % a 10 %— por valor de 75.000 millones de dólares, medida que entraría en vigor en dos fechas: el 1 de septiembre y el 15 de diciembre.

Con esta decisión, Pekín respondió a su vez a acciones similares que emprendió Washington anteriormente. Días después, el Gobierno chino dejó caer el yuan, medida ante la cual las autoridades estadounidenses aseguraron que China es "un manipulador de divisas".

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