El Gobierno de Bahamas ha negado las acusaciones de que esté rebajando el número de muertos provocados por el devastador paso del huracán Dorian después de que el último recuento oficial estableciera las víctimas en 44, una cifra muy por debajo de las afirmaciones de los residentes locales.
El ministro de Salud del país antillano, Duane Sands, señaló el pasado domingo al periódico The Miami Herald que el recuento de cuerpos "no es la prioridad" en este momento, mientras que varios testigos reportan haber visto en la isla los restos de cientos de fallecidos.
"La prioridad es encontrar a esas personas para sus seres queridos que los extrañan, cuidar, brindar consuelo a las personas que están heridas, que sufren, esa es la prioridad. Poner comida en las barrigas de las personas y agua en las gargantas", declaró Sands.
El funcionario subrayó asimismo que el Gobierno solo está contabilizando las muertes confirmadas cuando los cuerpos llegan a la morgue y calificó de "falsas" y "desafortunadas" las acusaciones sobre un falseamiento de las cifras.
Dorian azotó las Bahamas al comienzo de la semana pasada con vientos de hasta 295 kilómetros por hora, cobrándose la vida de al menos 44 personas y destruyendo innumerables viviendas. Posteriormente, pasó por los estados estadounidenses de Florida, Georgia y las Carolinas del Sur y del Norte, alcanzando el pasado domingo la parte meridional de Canadá.