El presidente de EE.UU., Donald Trump, ha aseverado este domingo que su país reaccionará sin demora y probablemente con una fuerza excesiva a cualquier ataque por parte de Irán. El mandatario ha indicado que la publicación debe considerarse como un aviso legal para el Congreso estadounidense.
"Estas publicaciones en los medios [sociales] servirán como notificación al Congreso de EE.UU. de que, si Irán ataca a cualquier persona u objetivo de EE.UU., EE.UU. responderá rápida y completamente, y tal vez de manera desproporcionada", ha señalado Trump en su cuenta de Twitter.
"Este aviso legal no es obligatorio, ¡pero sin embargo lo doy!", ha agregado.
Ayer, el mandatario ha anunciado que EE.UU. había "establecido como objetivo 52 sitios iraníes (que representan a los 52 rehenes estadounidenses que Irán tomó hace muchos años), algunos de muy alto nivel y muy importantes para Irán y la cultura iraní" que "serán golpeados muy rápido y muy duro" si intereses o ciudadanos estadounidenses son atacados por Teherán.
Las declaraciones de Trump vienen en el contexto de altas tensiones entre EE.UU. e Irán tras el asesinato, el 2 de enero, del mayor general iraní Qassem Soleimani.
Soleimani fue una figura clave en la dirección de las acciones militares de Irán en Oriente Medio. Estaba al frente de los servicios de Inteligencia iraníes y gozaba de una gran popularidad en su país gracias a sus numerosos méritos, entre los que se cuenta haber dirigido la lucha de milicias chiitas contra el Estado Islámico en Irak y Siria. Varios expertos consideran que Soleimani fue la segunda persona más poderosa en Irán, tras el líder supremo, ayatolá Alí Hoseiní Jameneí, y tenía hasta más influencia que el presidente, Hasán Rohaní.
Además de él, en el bombardeo de este jueves murieron Abu Mahdi al Muhandis, el jefe de las Fuerzas de Movilización Popular (FMP) y comandante de la milicia Kataib Hezbolá (KH), y al menos otras 10 personas.
El Pentágono confirmó la autoría del ataque de misiles perpetrado este 2 de enero en la capital iraquí, el cual fue efectuado "bajo la dirección" de Trump y "tenía como objetivo disuadir futuros planes de ataque iraníes". El viernes, el presidente estadounidense ya explicó su posición sobre el asesinato de Soleimani y calificó la acción de "medidas para detener una guerra".
Por su parte, el presidente de Irán, Hasán Rohaní, declaró que Teherán y otras naciones de la región "vengarán" el asesinato de Soleimani y aseguró que esta acción hará que Teherán esté "más decidido" en su resistencia contra EE.UU. Previamente, el canciller iraní, Mohammad Javad Zarif, calificó los ataques de EE.UU. de "acto de terrorismo internacional", mientras que el líder supremo del país, Alí Hoseiní Jameneí, advirtió que a los "criminales" que mataron al general les espera una dura venganza.