El Departamento de Estado de EE.UU. ha informado este viernes que Turquía no pidió a la OTAN ejercer el artículo 5 del tratado de la Alianza Atlántica, el cual prevé que un ataque contra uno o varios de sus miembros se considera un ataque contra todos, según recoge Reuters.
Al mismo tiempo, de acuerdo con un alto funcionario del organismo, citado por la agencia, la única forma en que Washington busca ayudar a Ankara en sus acciones contra las fuerzas del Gobierno sirio es el intercambio de información y equipo.
"Estamos trabajando en formas de apoyar a los turcos, una vez más, esto no implicará movimientos militares de las unidades estadounidenses", señaló el oficial.
"Como aliado de la OTAN e importante socio de ventas militares en el extranjero, tenemos varios intercambios de información y relaciones de equipo con los turcos. Estamos viendo qué podemos hacer con urgencia en este momento para ayudarlos", indicó el funcionario.
El ataque de Turquía
Las tensiones entre Ankara y Damasco aumentaron drásticamente luego que Turquía impactara más de 200 objetos del Gobierno sirio en Idlib como represalia a un ataque de este jueves de las fuerzas gubernamentales de Bashar al Assad, en el cual murieron al menos 33 soldados turcos y varios resultaron heridos.
Previamente, el Departamento de Estado de EE.UU. expresó su apoyo a Turquía en relación con su ataque contra el Gobierno sirio. "Apoyamos a Turquía, nuestro aliado de la OTAN", dijo un representante del organismo. Este viernes, la Alianza Atlántica celebró una reunión sobre la situación en Siria, a petición de Turquía.
El Ministerio de Defensa de Rusia, por su parte, declaró que los soldados turcos, atacados por las fuerzas del Gobierno sirio, se encontraban entre "las formaciones de grupos terroristas". Al mismo tiempo, el organismo subrayó que las coordenadas de ubicación de las tropas turcas, proporcionadas por Ankara, indicaban que "no había ni debía haber unidades de las Fuerzas Armadas turcas en el área de Behun", donde se produjo el ataque.
El presidente ruso, Vladímir Putin, mantuvo este viernes una conversación telefónica con su homólogo turco, Recep Tayyip Erdogan, durante la cual los dos líderes acordaron discutir la organización de una cumbre en relación con la situación en Idlib.