Francia le da 2 meses a Turquía para "poner fin a sus peligrosas aventuras" y la amenaza con medidas en caso contrario
Francia espera que Turquía satisfaga antes del fin de este año las demandas de París, en lo referente a sus acciones en el Mediterráneo oriental, comunicó este sábado el Palacio del Elíseo, citado por Reuters.
"Francia ha reunido a sus socios europeos, que comparten la demanda de que Turquía debe poner fin a sus peligrosas aventuras", reza el comunicado de la oficina del presidente francés, Emmanuel Macron. Señaló que, si Recep Tayyip Erdogan no responde en dos meses, enfrentará medidas.
Este sábado también se conoció que las autoridades francesas tomaron la decisión de llamar a consultas a su embajador en Turquía, tras calificar como "inaceptables" las declaraciones del presidente turco de que su homólogo francés "necesita tratamiento mental" por su actitud hacia los musulmanes. La retórica de Erdogan se endureció después de que Macron prometió luchar contra el "separatismo islámico" en Francia.
Las relaciones entre París y Ankara empeoraron en los últimos meses a causa del apoyo de Francia a Grecia, que mantiene una disputa con Turquía por las reservas de hidrocarburos en el Mediterráneo oriental. El 13 de agosto, el líder francés anunció la decisión de aumentar temporalmente la presencia militar en el Mediterráneo y exigió que Turquía detuviera la exploración petrolera. En respuesta, Erdogan le advirtió a su colega que "no se meta" con Ankara.
Sin embargo, los focos de tensión en las relaciones turco-francesas no se limitan a esto: ambos países se culpan por su papel en el conflicto interno libio. También hay que resaltar el reciente incidente marítimo, calificado por el Ministerio de Defensa de Francia como "comportamiento agresivo" de la Armada de Turquía y tildado posteriormente por el ministro de Exteriores turco, Mevlut Cavusoglu, de hecho "no correspondiente a la verdad", por el cual exigió que Francia "debe disculparse". Además, París acusó a Turquía de enviar yihadistas desde Siria a Nagorno Karabaj, algo rechazado por el presidente turco.