Los corredores de apuestas barajan una probabilidad de 6 a 1 a que Liz Truss será sustituida como primera ministra del Reino Unido en 35 días, el tiempo que tarda en degradarse la lechuga.
Para seguir 'la carrera', el diario británico Daily Star ha creado una transmisión en vivo en YouTube, en la que una foto enmarcada de la jefa del Gobierno comparte mesa con una lechuga a la que han puesto dos ojos.
La primera ministra ha sido blanco de severas críticas tras su anuncio de recortes de impuestos no financiados, lo que ha generado desconfianza en los mercados y en la ciudadanía, mientras su popularidad ha caído hasta los niveles de aprobación más bajos de la historia del país.
- Los recortes fiscales anunciados el pasado 23 de septiembre por el ya excanciller de Hacienda, Kwasi Kwarteng, implicaban un enorme endeudamiento por parte del Gobierno. Se esperaba que Londres gastara 150.000 millones de libras esterlinas en subvencionar los costes energéticos de los consumidores y las empresas.
- Truss finalmente ha dado marcha a su plan fiscal de congelar el impuesto de sociedades, y desde el próximo año lo subirá del 19 % al 25 %, tal y como planeaba el Gobierno de su predecesor Boris Johnson. Con este incremento, espera recaudar 18.000 millones de libras esterlinas adicionales (unos 20.180 millones de dólares) al año para las arcas públicas.
- A diferencia de los grandes recortes fiscales de la década de 1980, Kwarteng solicitó decenas de miles de millones de libras para financiar sus planes, lo que aumentaría la demanda en un momento en que el Banco de Inglaterra está subiendo los tipos de interés para controlar la inflación.
- En medio de las críticas, Kwarteng anunció este viernes su dimisión. En su cuenta de Twitter, el extitular de Hacienda confirmó que Truss le pidió "que se haga a un lado".
- Tras su renuncia, el exsecretario de Asuntos Exteriores, Jeremy Hunt, se hará cargo de la cartera de Hacienda, informó The Guardian, sugiriendo que este nombramiento apunta a que la primera ministra quiere ampliar su apoyo, por lo que es probable que modere su prisa en introducir recortes fiscales.