Líderes europeos piden "un shock" financiero y reiteran sus compromisos climáticos pese a la crisis energética
Los líderes de los países europeos participantes en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático 2022, la COP27, que arrancó este lunes en la ciudad egipcia de Sharm el Sheij, recalcaron la necesidad de cumplir los compromisos para combatir la crisis climática, pese a la crisis energética y las dificultades que atraviesa la economía global.
En su discurso en el marco de la inauguración de la cumbre, el canciller alemán, Olaf Scholz, resaltó que en los últimos tres años su país ha aumentado en más de un tercio los fondos públicos destinados a financiar la lucha internacional contra el cambio climático, hasta llegar a 5.300 millones de dólares en 2021, y anunció la intención de llevar la cifra a 6.000 millones de dólares anuales para 2025, además de contribuir con 170 millones dólares para un paraguas global contra los riesgos climáticos, recoge la prensa local.
Paralelamente, alertó de que "no debe haber un renacimiento mundial de las energías fósiles" y reiteró el compromiso de Alemania de abandonar el carbón, a pesar de que el conflicto en Ucrania haya obligado a reconectar a la red las centrales eléctricas que utilizan ese combustible fósil. Entretanto, señaló que su nación busca convertirse en uno de los primeros países industrializados en lograr la neutralidad climática para 2045.
Francia pide "un shock" financiero
Por su parte, el presidente francés, Emmanuel Macron, advirtió contra la idea de pensar que "tenemos otras prioridades, que el clima puede esperar", dado que "la emergencia climática ya está aquí", reseñan medios locales.
"Nuestra obligación es seguir actuando para la mitigación y la adaptación, a pesar de que haya vuelto a haber una guerra en suelo europeo", insistió el mandatario, y exigió "un shock" financiero para ayudar a luchar contra el cambio climático en los países pobres, que tienden a ser los más vulnerables a sus efectos.
En este contexto, alertó sobre "el desmoronamiento de la confianza" entre el Norte y el Sur, ya que los países ricos fallaron en cumplir su promesa de dar ayuda por valor de 100.000 millones de dólares anuales a los pobres para luchar contra la crisis climática. "Tenemos que evitar esta gran división en el tema del clima. Muchos países nos oyen hablar de los 100.000 millones y no ven el dinero", agregó.
Además, en un encuentro con jóvenes en el marco de la cumbre, pidió a "los países ricos no europeos" que "paguen su parte" en cuanto a la ayuda a los países pobres en la lucha contra el cambio climático. "EE.UU. y China deben responder" a ese desafío, dijo, ya que hasta ahora los europeos son "los únicos que pagan".
Entre tanto, el nuevo primer ministro británico, Rishi Sunak, confirmó que su país destinará 13.350 millones de dólares a financiar la lucha climática en el ámbito internacional y triplicará los fondos dedicados a la "adaptación" a los nuevos fenómenos, hasta llegar a 1.727 millones de dólares en 2025. Indicó, además, que el conflicto en el territorio ucraniano "no es una razón para ralentizar la lucha contra el cambio climático", sino para "actuar más rápido", y una oportunidad para diversificar los suministros de energía del Reino Unido.
Combinar "la sostenibilidad ambiental, económica y social"
De manera similar, la nueva primera ministra de Italia, Giorgia Meloni, aseguró que su país ha casi triplicado los fondos que dedica a la lucha contra el cambio climático, que recibirán 1.400 millones de dólares en los próximos cinco años.
"Nos encontramos en un momento decisivo en la lucha contra el cambio climático. En los últimos meses hemos experimentado sus dramáticos efectos en Europa, Pakistán, el Cuerno de África y muchas otras regiones del planeta", indicó. "Todos estamos llamados a realizar esfuerzos más profundos y rápidos para proteger nuestro planeta, nuestro hogar común. Para ello, tendremos que mantener a las personas en el centro y transformarnos en consecuencia, combinando la sostenibilidad ambiental, económica y social", agregó Meloni, y reiteró el firme compromiso de Italia de "continuar su camino de descarbonización, en pleno cumplimiento de los objetivos del Acuerdo de París".
Mientras, el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, anunció que su país movilizará un total de 30 millones de dólares adicionales para la lucha global contra el cambio climático, y aseguró que apoya la movilización de "recursos públicos y privados a gran escala para acelerar la reducción de emisiones" de efecto invernadero.
Dijo, además, que España "cuenta con un marco normativo coherente desde el cual alcanzar la neutralidad climática en 2050" y que 30 % de los presupuestos del Estado se dedican a combatir el cambio climático.
- La COP27, que se celebra del 7 al 18 de noviembre, cuenta con la asistencia de representantes de casi 200 países, reunidos para garantizar la plena implementación del Acuerdo de París para evitar que la temperatura aumente más allá de 1,5 grados centígrados hacia fines de siglo.