Hungría tacha de "falsos" los reportes sobre su veto a un paquete de ayuda de la UE a Ucrania

Budapest asegura estar dispuesto a seguir adelante con su apoyo financiero a Kiev de forma bilateral.

El primer ministro de Hungría, Viktor Orbán, ha calificado de "falsos" los reportes acerca de que su país habría vetado un paquete de ayuda financiera de unos 18.000 millones de euros para a Ucrania del fondo conjunto de la Unión Europea (UE) para 2023.

"Las noticias de hoy eran todas sobre Hungría vetando la ayuda financiera a Ucrania. Son noticias falsas. Hungría está dispuesta a dar ayuda financiera a Ucrania, de forma bilateral. Sin veto, sin chantaje", tuiteó el jefe del Ejecutivo.

Orbán subrayó que Budapest está en contra de proporcionar el paquete financiero conjunto, porque el bloque comunitario tendría que endeudarse por su cuenta. "Si seguimos avanzando hacia una comunidad de deuda, no podremos dar marcha atrás. Prevemos un futuro diferente para Europa. Un futuro basado en Estados miembros fuertes, en lugar de en enormes montones de deuda común", explicó.

Horas antes, reportes mediáticos aparecidos este martes, incluido el de AP, sostenían que Budapest había vetado la aprobación del paquete.

Disputa más amplia entre Budapest y la UE

A primeros de noviembre, el canciller húngaro, Peter Szijjarto, advirtió que Budapest no apoyará la asignación de la suma en cuestión, aunque aseguró que están dispuestos a seguir adelante con el apoyo financiero de forma bilateral.

En aquel entonces, el jefe de la diplomacia húngara explicó que el rechazo se debía a que su país no había recibido su cuota de los fondos europeos de recuperación anticovid, dado que Bruselas evalúa las medidas del Gobierno local para avanzar en numerosos requisistos del Estado de derecho. El asunto se enmarca en una disputa más amplia entre Budapest y Bruselas, que difieren en cuestiones como los estándares democráticos, la migración, los derechos LGBT o la lucha anticorrupción.

Hasta ahora, Hungría ya ha aceptado tomar 17 medidas contra la corrupción, incluida la creación de un grupo de trabajo y cambios en las normas de contratación pública, pero la Comisión Europea le exige más acciones.