Eslovaquia prohibirá temporalmente la importación de cereales y varios otros productos ucranianos, anunció este lunes el primer ministro eslovaco, Eduard Heger.
Heger afirmó que un grupo de trabajo se reunirá este lunes para discutir el asunto, agregando que se publicarán los resultados del encuentro.
Un día antes, el ministro de Agricultura búlgaro, Yavor Gechev, declaró que evalúa también prohibir la importación de granos ucranianos. De acuerdo con sus palabras, es necesario defender los intereses de Bulgaria, especialmente "cuando dos países reaccionan de esta manera, si no reaccionamos del mismo modo, las acumulaciones [de cereales ucranianos] pueden aumentarse aún más", recogen medios locales.
El Gobierno de Hungría anunció el pasado sábado la suspensión de las importaciones de cereales, semillas oleaginosas y algunos otros productos agrícolas provenientes de Ucrania, siguiendo una decisión similar adoptada por Polonia. El ministro de Agricultura húngaro, István Nagy, explicó que la medida busca evitar "daños graves" a los agricultores locales. Además, indicó que tras la anulación de los aranceles, Ucrania empezó a inundar el mercado europeo con comestibles de origen agrícola baratos, lo cual "imposibilitó a los agricultores húngaros y centroeuropeos vender sus productos".
La crisis originada por los productos agrícolas baratos de Ucrania desembocó en protestas de agricultores en varios países europeos, entre ellos, Rumanía, Bulgaria y Polonia. Los manifestantes rechazan que sus mercados se inunden de mercancías ucranianas e instan a la UE a que reconsidere su política para el sector, que, según lo planeado inicialmente, buscaba facilitar el transporte de comestibles ucranianos a los mercados de terceros países.