El exjefe paramilitar de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), Salvatore Mancuso, dio su primera rueda de prensa a los medios colombianos tras haber sido excarcelado la víspera de la cárcel La Picota, en Bogotá, donde permanecía retenido desde febrero pasado por tres casos pendientes en la Justicia ordinaria, luego de su deportación desde EE.UU., donde cumplió una condena por narcotráfico.
El también gestor de paz, que ejercerá su cargo desde este jueves, fue nombrado por el presidente Gustavo Petro, hace casi un año, para finiquitar el conflicto armado que sacudió al país durante el Gobierno de Álvaro Uribe (2002-2010) y que significó la firma de un acuerdo de paz con las AUC.
En su comparecencia ante la prensa, el excomandante paramilitar manifestó: "No le debo nada a la Justicia de ningún país del mundo. Estoy a disposición del consejero de paz, Otty Patiño; tendremos una reunión para programar todo lo que tiene que ver con la paz que debo desarrollar por el país".
Llamado a Uribe
Esta reacción ocurre luego de que Uribe escribiera en su cuenta de X que no sorprendía la finalidad de la libertad de Mancuso y que los otros paramilitares que habían sido condenados a años de cárcel no habían recibido el mismo trato.
Frente a eso, el gestor de paz recordó que no había recibido algún tipo de beneficio penal debido a que lo excarcelaron por "pena cumplida". "Eran ocho años e hice 17 años y once meses". "Expresidente Uribe, lo invito a que construyamos, no vengo a tomar retaliaciones o venganza", concluyó.
El exjefe paramilitar también aseveró que se mantendrá en Colombia y adelantó que ha pedido al Gobierno de Nicolás Maduro ir a Venezuela para "recuperar los restos de víctimas" de los paramilitares que fueron enterradas en el estado Táchira, fronterizo con el país vecino, entre 2001 y 2002.