El Kremlin ha ofrecido este viernes detalles del histórico intercambio de prisioneros que tuvo lugar entre Occidente y Rusia el día de ayer.
El canje se negoció a través del Servicio Federal de Seguridad de Rusia (FSB) y la Agencia Central de Inteligencia de EE.UU. (CIA). Sin embargo, "todo el trabajo interno de las negociaciones de intercambio no puede ser público", dijo el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov.
¿Qué se reveló?
La liberación de los ciudadanos rusos fue posible gracias a la firme exigencia del presidente Vladímir Putin de que los estadounidenses condenados fueran canjeados en lugar de extraditados, señaló.
El vocero también explicó por qué Putin saludó en español a los hijos de los espías rusos. Según Peskov, los niños no saben ruso y solo se enteraron de ello cuando el avión partió de Ankara.
Posteriormente, los menores también preguntaron a sus padres quién se había reunido con ellos, dando a entender que tampoco reconocían al mandatario. Peskov detalló que para estas familias existía una amenaza real de privación de derechos parentales: mientras estaban encarcelados, solo podían ver a sus hijos en contadas ocasiones. Según Peskov, Putin acudió personalmente a reunirse con los liberados, ya que se trata de "un homenaje a quienes sirven a su país".
También agradeció al presidente de Bielorrusia, Alexánder Lukashenko, por su ayuda en la elaboración de la compleja cadena de intercambio. Asimismo, Peskov calificó de absurdas las declaraciones según las cuales Rusia estaría encarcelando deliberadamente a extranjeros para tener con qué "regatear" con Occidente.
Además, el Kremlin se pronunció sobre la suerte de Alexánder Vinnik, acusado por EE.UU. de crear la plataforma de intercambio de criptomonedas BTC-e y blanquear a través de ella 4.000 millones de dólares. El hombre no se vio implicado en el asunto y permanece en una prisión estadounidense. Según Peskov, el destino de todos los rusos encarcelados en EE.UU. es motivo de preocupación constante. Por lo tanto, los servicios rusos seguirán trabajando por el regreso de sus ciudadanos, aseguró el vocero.
Asimismo, Peskov reveló que el ciudadano ruso Vadim Krásikov, que formó parte del intercambio de presos, es un efectivo del FSB. Detalló que servía en la unidad antiterrorista de operaciones especiales del organismo, conocida como Alfa, junto con algunos miembros de la seguridad del presidente ruso, que lo recibieron ayer en el aeropuerto. En 2021 Krásikov fue condenado en Alemania a cadena perpetua por el asesinato del excomandante checheno Zelimján Jangoshvili, realizado en 2019.