El presidente de Argentina, Javier Milei, celebró este miércoles el respaldo de la Cámara de Diputados a su veto contra la ley que establecía un aumento de haberes para jubilados y pensionados.
El mandatario se pronunció minutos después de la sesión en el Congreso en la que se trató el veto del Ejecutivo a la ley de movilidad jubilatoria, que fue aprobada semanas atrás y que significaba un incremento de 8,1 %. La votación resultó en 153 a favor de mantener la ley, 87 en contra (para respaldar el veto) y 8 abstenciones.
"Hoy 87 héroes le pusieron un freno a los degenerados fiscales que intentaron destruir el superávit fiscal que los argentinos con tanto esfuerzo lograromos conseguir", dijo Milei desde su cuenta de la red social X.
"Innegociable"
El presidente argentino emitió un breve mensaje que intituló: 'Rechazo al aumento del gasto público'.
"Evidentemente los políticos siguen pensando que los argentinos somos tontos y no vemos sus malintencionadas maniobras para voltear a un gobierno que por primera vez elige decirle a los argentinos una verdad incómoda en lugar de una mentira confortable", manifestó el líder libertario.
Y acotó que el "déficit cero es innegociable".
El Gobierno también se expresó a través de la cuenta de la Oficina del Presidente. En las redes sociales, la Casa Rosada destacó la "labor patriótica" de esos 87 diputados, y señaló que su objetivo principal es evitar la destrucción del superávit fiscal.
"Un déficit fiscal perpetuo lleva al colapso de una nación; cuando el gasto supera la recaudación, no hay otra manera de solventarlo que aumentando los impuestos, emitiendo dinero y generando inflación, o tomando deuda que implica inflación para las futuras generaciones", afirma el comunicado.
En ese sentido, Milei advirtió a los congresistas opositores que si presentan proyectos que vayan en contra de ese equilibrio serán anulados por el Ejecutivo: "Les vamos a vetar todo".
Victoria libertaria en el Congreso
En la jornada, la oposición fracasó en su intento de restituir la nueva fórmula de movilidad jubilatoria que había sido aprobada en el Congreso y anulada por orden del jefe del Ejecutivo.
Para alcanzar los votos necesarios que avalaran su veto, el mandatario Milei invitó el martes a un grupo de cinco diputados de la Unión Cívica Radical (UCR) a la Casa Rosada, sede del Gobierno, y logró que esos congresistas, que habían votado a favor de la ley, ahora lo hicieran respaldando el veto presidencial.
El hecho generó una ola de especulaciones y protestas por la presunta compra de votos o reparto de cargos por parte de la gestión libertaria hacia los legisladores que viraron su decisión.
Mientras el Legislativo trataba la cuestión del veto, cientos de manifestantes protestaron en las inmediaciones del Congreso y se generaron momentos de gran tensión por la represión de la Policía.