Merz vs. Macron: una grieta que se abre en el corazón de la UE

El mandatario francés provocó indignación del canciller alemán al querer dialogar con el mandatario ruso, según Der Spiegel.

El dúo europeo entre Friedrich Merz y Emmanuel Macron "parece dividido" tras la iniciativa del presidente de Francia de iniciar conversaciones directas con Vladímir Putin, reporta Der Spiegel.

El paso no había sido coordinado con el canciller alemán, que habría decidido ignorar el asunto en público para evitar un conflicto abierto con Francia. "En Berlín no quieren hablar mucho del tema. Cuando se pregunta al Gobierno alemán sobre la delicada iniciativa de Emmanuel Macron de dialogar directamente con Vladímir Putin, las respuestas son escuetas", señala la revista.

Así, un portavoz del Gobierno de Berlín optó por restarle importancia a la situación, señalando que no se concretó ninguna llamada telefónica entre Macron y Putin sobre el conflicto en Ucrania y solo hubo "indicios mutuos" de los que Alemania había tomado nota.

"Diferencias cada vez más difíciles de ocultar"

Sin embargo, la impresión de la discordia en torno a ese episodio —"el último de una serie de diferencias franco-alemanas cada vez más difíciles de ocultar"— "es difícil de disipar", señala Der Spiegel, que afirma que "la prometedora alianza Merz-Macron, concebida para impulsar y mantener unida a Europa, se tambalea". "Un colapso es inminente", advierte.

Si bien un portavoz de Berlín, citado por Der Spiegel, afirmó que Merz "nunca descartó categóricamente" dialogar con Putin, no hay planes concretos al respecto.

Tanto Merz, como Macron se ven debilitados a nivel nacional y, por lo tanto, buscan fortalecer su imagen con éxitos en la política exterior, aspirando al papel de líder de la Unión Europea donde hacen frente a grandes potencias como Estados Unidos, Rusia y China, indica la revista.

Como resultado, "en un momento en que Ucrania, como toda Europa, se enfrenta a cuestiones existenciales, el dúo central del continente parece cada vez más dividido", agrega.

Esta brecha se acentuó aún más por el papel de Macron en el fracaso del plan de Merz en la cumbre en Bruselas la semana pasada, cuando el mandatario francés torpedeó la propuesta de utilizar miles de millones de euros en activos rusos, gran parte de los cuales están en bancos privados franceses, para cubrir otro préstamo europeo para financiar al régimen de Kiev.