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El kirchnerismo "se consolida" en Argentina pese a la derrota en los comicios
El partido oficialista argentino Frente para la Victoria ha logrado mantener la mayoría bicameral, pero con un quórum ajustado. Así se desprende de los resultados preliminares de las elecciones legislativas celebradas este domingo en Argentina.
Pese a perder en varias regiones importantes, el kirchnerismo "se blinda" como la primera fuerza política, según las palabras del vicepresidente del país, Amado Boudou.
Argentina definió en estos comicios la renovación de la mitad de las bancas en la Cámara de Diputados y un tercio de las del Senado. A poco de cumplirse 30 años de la vuelta de la democracia al país, el proceso contó con una alta participación ciudadana, que superó el 75%.
"Nosotros creemos que hay un fin de ciclo en la Argentina y que han pasado ya diez años de kirchnerismo. Y que evidentemente hoy el Gobierno no resuelve los problemas, en todo caso genera más problemas por malas decisiones de política pública. Y creemos en ese sentido que los argentinos empiezan a buscar en las urnas una alternativa", dijo por su parte Laura Alonso, diputada electa por el partido Propuesta Republicana (PRO).
Aunque sufrió derrotas significativas, el Frente para la Victoria se mantuvo como la fuerza más votada en todo el país y conservará la mayoría en el Parlamento. Perdió sin embargo en los puntos más importantes, como la provincia y la ciudad de Buenos Aires. Estos distritos no solo aportan la mayor cantidad de legisladores, sino que además otorgan a los vencedores una importante proyección nacional para presentarse como candidatos en las presidenciales.
"Estamos liderando esta elección en los tres segmentos: en legisladores de la ciudad, diputados nacionales y senadores. Y fundamentalmente ya proyectándose el PRO como una fuerza nacional con la alternativa que vamos a proponer de la candidatura de Mauricio Macri a presidente para el 2015", adelantó Sergio Bergman, diputado electo por el PRO.
Para los analistas sin embargo, no todo está dicho, ya que hay un dato histórico a tener en cuenta. Se trata de la capacidad que en estos diez años ha tenido el partido de Gobierno de Argentina para sobreponerse a resultados adversos.
"El kirchnerismo, siempre que le ha ido mal en las elecciones, redobló de alguna manera la apuesta. Tomó la iniciativa y ha tomado medidas innovadoras tratando de recuperar terreno e iniciativa política", opinó el analista político Sebastián Abrevaya.
La presidenta Cristina Fernández de Kirchner, ausente en la campaña electoral debido a sus problemas de salud, será la encargada a su regreso de tomar las decisiones que definirán el rumbo de su espacio político. Lo hará tras unas elecciones celebradas a la mitad de su mandato y, paradójicamente, en la misma fecha en la que perdió a su principal compañero tanto en su vida personal como política.
Los homenajes a Néstor Kirchner a los tres años de su muerte se mezclan con el desafío que deberá enfrentar el Gobierno tras el resultado de estas elecciones. En los próximos dos años el oficialismo y la oposición se enfrentarán en una dura contienda para ver si se profundiza el modelo de país iniciado por el exmandatario en 2003 o si, por el contrario, la Argentina cambia su rumbo político.
Argentina definió en estos comicios la renovación de la mitad de las bancas en la Cámara de Diputados y un tercio de las del Senado. A poco de cumplirse 30 años de la vuelta de la democracia al país, el proceso contó con una alta participación ciudadana, que superó el 75%.
"Nosotros creemos que hay un fin de ciclo en la Argentina y que han pasado ya diez años de kirchnerismo. Y que evidentemente hoy el Gobierno no resuelve los problemas, en todo caso genera más problemas por malas decisiones de política pública. Y creemos en ese sentido que los argentinos empiezan a buscar en las urnas una alternativa", dijo por su parte Laura Alonso, diputada electa por el partido Propuesta Republicana (PRO).
El kirchnerismo, siempre que le ha ido mal en las elecciones, redobló de alguna manera la apuesta. Tomó la iniciativa y ha tomado medidas innovadoras tratando de recuperar terreno e iniciativa política
Aunque sufrió derrotas significativas, el Frente para la Victoria se mantuvo como la fuerza más votada en todo el país y conservará la mayoría en el Parlamento. Perdió sin embargo en los puntos más importantes, como la provincia y la ciudad de Buenos Aires. Estos distritos no solo aportan la mayor cantidad de legisladores, sino que además otorgan a los vencedores una importante proyección nacional para presentarse como candidatos en las presidenciales.
"Estamos liderando esta elección en los tres segmentos: en legisladores de la ciudad, diputados nacionales y senadores. Y fundamentalmente ya proyectándose el PRO como una fuerza nacional con la alternativa que vamos a proponer de la candidatura de Mauricio Macri a presidente para el 2015", adelantó Sergio Bergman, diputado electo por el PRO.
Para los analistas sin embargo, no todo está dicho, ya que hay un dato histórico a tener en cuenta. Se trata de la capacidad que en estos diez años ha tenido el partido de Gobierno de Argentina para sobreponerse a resultados adversos.
"El kirchnerismo, siempre que le ha ido mal en las elecciones, redobló de alguna manera la apuesta. Tomó la iniciativa y ha tomado medidas innovadoras tratando de recuperar terreno e iniciativa política", opinó el analista político Sebastián Abrevaya.
La presidenta Cristina Fernández de Kirchner, ausente en la campaña electoral debido a sus problemas de salud, será la encargada a su regreso de tomar las decisiones que definirán el rumbo de su espacio político. Lo hará tras unas elecciones celebradas a la mitad de su mandato y, paradójicamente, en la misma fecha en la que perdió a su principal compañero tanto en su vida personal como política.
Los homenajes a Néstor Kirchner a los tres años de su muerte se mezclan con el desafío que deberá enfrentar el Gobierno tras el resultado de estas elecciones. En los próximos dos años el oficialismo y la oposición se enfrentarán en una dura contienda para ver si se profundiza el modelo de país iniciado por el exmandatario en 2003 o si, por el contrario, la Argentina cambia su rumbo político.
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