El Gobierno de Ecuador mantendrá el estado de excepción sólo en Quito
El ministro de Seguridad Interna y Externa de Ecuador, Miguel Carvajal anunció que el estado de excepción, vigente en Ecuador desde la revuelta policial del pasado 30 de septiembre, se mantendrá de forma indefinida en Quito. Esta medida, no supone restricción de derechos, sino tiene el fin de garantizar la seguridad en las instituciones públicas.
El titular indicó que la decisión la tomó el Gobierno para que la Fuerza Armada continúe protegiendo a las instituciones importantes gubernamentales estatales situadas en la ciudad, como el Palacio de Gobierno y la Asamblea Nacional, tras la rebelión policial de hace dos semanas, que fue usada para derrocar al Ejecutivo.
El ministro explicó que la decisión era necesaria también para continuar con la investigación "que… nos permitirán tener las pruebas o las certezas sobre esta circunstancia" de la insubordinación policial del 30 de septiembre, a la cual el Gobierno ha calificado como un intento de golpe de Estado.
Asimismo, señaló que la Policía, sometida a un proceso de reorganización tras la revuelta de agentes de tropa, nuevamente ha salido a las calles para cumplir su misión constitucional de brindar seguridad a la ciudadanía y aseguró que el proceso de normalización de las actividades en el país, avanza a un ritmo acelerado y dijo esperar que esta tendencia se consolide para que no se tengan que adoptar medidas como el estado de excepción.
Es decir, las autoridades resolverán cuándo concluir este nivel de seguridad en la capital ecuatoriana "según como vaya evolucionando la situación".
El pasado 30 de septiembre, un grupo de policías, descontentos por el supuesto recorte de beneficios salariales que establecía una ley aprobada en la Asamblea Nacional (Parlamento) sobre servicio público, se sublevó y concentró una protesta en un regimiento de Quito.
El presidente de la nación, vino al cuartel policial para intentar establecer un dialogo con los manifestantes, pero fue agredido y 'secuestrado' por los agentes, que lo retuvieron unas horas en un hospital de la institución aledaña. Una operación combinada entre grupos especiales de las Fuerzas Armadas y de la Policía logró rescatar a Correa del centro sanitario, lo que causó la muerte de al menos cinco personas según los datos de la agencia de noticias EFE.
El Gobierno decretó el estado de excepción en todo el territorio nacional, por cinco días, pero luego lo prorrogó hasta la medianoche de 8 de octubre (hora local). Sin embargo el mandatario dijo que no habrá "perdón ni olvido" contra los policías que azuzaron la revuelta, así como contra ciertos políticos opositores que identificó como partícipes de la rebelión.