Cuba continúa su proceso de reformas económicas

En Cuba continúa el proceso de reajuste laboral para mejorar la situación económica en el país. Durante el pleno de la Central de Trabajadores de Cuba (CTC) el primer vicepresidente de la nación, José Ramón Machado Ventura, la Ministra de Trabajo y Seguridad Social, Margarita González, y el secretario general de la CTC, Salvador Valdés Mesa, entre otros asistentes, discutieron y evaluaron una vez más la reforma laboral, el proyecto publicado en noviembre de 2010  que prevé la  eliminación de casi medio millón de empleos públicos para ampliar el sector del trabajo por cuenta propia en lo que queda de año.

Machado Ventura calificó el plan como "un proceso único en el mundo que persigue elevar los coeficientes económicos en favor del bienestar del pueblo" y que requiere  "profundizar en las labores de preparación y capacitación de los dirigentes sindicales".

En enero pasado los ministerios cubanos de la Industria, Azucarera, Agricultura, Salud Pública y Turismo lanzaron el proceso de reajuste laboral que se espera prolongar hasta el verano.

El cese de casi 500.000 empleados de ningún modo significa, según la administración, que los índices de desempleo vayan a experimentar un ascenso significativo: por el contrario se pretende que el proyecto lleve al aumento del sector privado y la disminución de gastos estatales. A los trabajadores despedidos se les ofrecerá otros puestos de trabajo que pueden aceptar o rechazar. Además a lo largo de cinco meses los que se quedaron sin trabajo recibirán una compensación igual al 60% del salario.

Con miras a los cambios económicos imprescindibles para el desarrollo de Cuba, el Gobierno ya ha empezado a emitir 250.000 nuevas licencias de autoempleo, lo que significa que por primera vez los empresarios podrán contratar a personal y abrir pequeños negocios privados en 178 profesiones diferentes.

Pero las reformas económicas en la isla caribeña no sólo implican la incorporación de casi 500.000 empleados al sector económico no estatal, sino también la implementación del sistema de ventas liberadas, según una nueva resolución del Ministerio de Comercio Interior.

Desde este mes el Gobierno cubano liberó la comercialización del azúcar. Esta medida podría ayudar a la actividad del sector por cuenta propia.

Antes el azúcar se vendía sólo mediante la cartilla de racionamiento que entrega a cada cubano de seis a nueve libras de ese producto mensualmente. La cartilla de racionamiento, vigente en Cuba desde 1962, está perdiendo algunos productos debido a la política de reformas económicas del Gobierno de Raúl Castro.

Desde ahora la libra de azúcar se venderá a unos 30 centavos de dólar en vez de su precio actual de menos de un centavo de dólar.

El costo de la libra de arroz también ascenderá de 15 a 20 centavos de dólar.

Las medidas emprendidas por Raúl Castro pretenden ayudar al país a mejorar su economía, dañada por el bloqueo económico de EE. UU., los huracanes en 2008 y por la crisis financiera mundial. Actualmente el país no dispone de mucho dinero en efectivo. Debido a este hecho Cuba se vio obligada a disminuir los subsidios, congelar las cuentas bancarias locales de empresas extranjeras y cesar los pagos a los acreedores en los últimos dos años. La economía cubana, antes en su mayor parte controlada por el Estado, ahora recibirá un nuevo impulso incentivando la afluencia del capital extranjero y descentralizando la gestión económica.