Argentina se despide del ´trovador de las pampas´, Facundo Cabral
Miles de personas acudieron el martes a Teatro ND Ateneo de la capital argentina para velar al cantautor Facundo Cabral, asesinado violentamente el pasado sábado en Guatemala.
El féretro con los restos mortales de Cabral fue trasladado a Buenos Aires por un avión de las Fuerzas Aéreas mexicanas que aterrizó en territorio argentino a las 8:30 del 12 de julio.
El velatorio, que en principio no estaba planeado pero finalmente se organizó por decisión de los familiares de Cabral, se inició al mediodía y duró hasta las 22:00 (hora local). La gran fila de personas que acudieron al teatro que fue el escenario de la última actuación porteña del artista, dificultó el tráfico en las inmediaciones del ND Ateneo. Los admiradores del talento y de la personalidad de Cabral llevaron flores al ataúd del fallecido y muchos no pudieron contener las lágrimas.
Los representantes del mundo artístico que fueron a despedir a su compañero describieron al difunto como un fiel defensor de la paz y enemigo de la violencia. Cabe mencionar que en 1996 el cantautor argentino fue designado mensajero de la Paz por las Naciones Unidas.
"Ahora para recordarlo tenemos que escucharlo y leerlo, con ese amor al prójimo y sin fronteras”, señalo Sergio Cabral, el sobrino del músico.
El miércoles a las 10:30 (hora local) la procesión fúnebre partirá hacia el cementerio Jardín de Paz de la capital argentina, donde el cuerpo de Facundo Cabral será incinerado, de acuerdo con su voluntad.
Las autoridades de Argentina declararon tres días de luto para rendir el último homenaje y expresar el respeto, el amor y el reconocimiento al fallecido artista.
Cabral, de 74 años, fue asesinado a tiros por un grupo de desconocidos en la capital guatemalteca, donde había ofrecido dos conciertos. El presidente guatemalteco, Álvaro Colom, prometió encontrar y castigar a los culpables de la muerte del artista. La Policía Nacional Civil de Guatemala detuvo el martes a dos sospechosos del asesinato y asegura que los disparos iban dirigidos contra el conductor del automóvil en el que viajaba el artista, el empresario nicaragüense Henry Fariña.