La violencia consume Siria, pese al llamamiento de la Liga Árabe
Damasco acusa a Qatar de tener una visión predeterminada y parcial sobre la crisis siria. Así ha criticado el embajador de Siria ante la Liga Árabe la propuesta de primer ministro qatarí de enviar a observadores de la ONU a este país árabe.
Según el político sirio, estas declaraciones se enmarcan en la escalada política y mediática contra Siria promovida por quienes buscan una intervención extranjera en el país árabe.
Con anterioridad la Liga Árabe autorizó a sus observadores enviados a Siria a continuar con su cometido, aunque sin la ayuda de las Naciones Unidas. Además, el organismo acordó elevar el número de expertos hasta 300. No obstante, pese a que la Liga Árabe ha instado a ambas partes del conflicto a cesar la violencia, el número de muertos en este país va en aumento.
La violencia no cesa
Dos atentados de terroristas suicidas sacudieron la capital, Damasco, en el plazo de dos semanas. El último tuvo lugar el pasado 6 de enero mostrando una vez más la escalada del conflicto sirio, pese a la presencia de los observadores de la Liga Árabe en el país.
Tras 10 meses de sangrientos enfrentamientos, la resolución de la crisis parece estar lejos. Aún queda por identificar a los responsables de la violencia en Siria. No obstante, la gente común sigue arriesgando sus vidas en la lucha por un futuro mejor.
Gene Sharp es uno de los principales expertos en revoluciones pacíficas y se asombra ante las acciones del pueblo sirio. “Aunque tanta gente ha muerto, las personas salen a las calles diciendo que no tienen miedo. Cuando la población pierde el temor es un gran logro en el camino hacia el éxito”, señala Sharp.
Pese a las promesas gubernamentales, muchos sienten que han sido demasiadas las muertes y la sangre derramada para conformarse ahora con algo menos que un cambio real e intenso.
Los militares: promotores y víctimas del conflicto
Pero la oposición se ve cada vez más dividida, con más y más militares desertores uniéndose a sus filas que se pronuncian por un derrocamiento violento del Gobierno. Según Sharp son esos soldados los que representan actualmente un peligro, ya que optaron por la violencia como el instrumento de su lucha contra las autoridades sirias y el Ejército del país.
Muchos militares leales al Gobierno de Bashar Al Assad han perdido la vida durante los largos meses del conflicto en esta nación árabe. Así, por ejemplo, Muhammad Ahmad Ben-Saddam, de 25 años, era un soldado del Ejército sirio y fue abatido mientras cumplía con sus obligaciones como militar. Lo único que les queda a sus parientes es llorar su muerte. El caso de esta familia, es solo uno entre muchos.
"La Liga Árabe debe encontrar una solución de la crisis siria"
Según la analista política Sara Marusek, “estas realidades tienen que ser reflejadas por los observadores de la Liga Árabe”. Asimismo la experta opina que las autoridades sirias tienen que tener “mucho cuidado e invitar a gente confiable a observar el proceso”, ya que también podría tratarse de personas que “puedan tener intereses políticos y que busquen solamente desestabilizar o menospreciar al régimen sirio”. Al mismo tiempo Marusek señala que la Liga Árabe debe encontrar una solución de la crisis siria, sin “prestar atención a la presión proveniente de Europa y EE. UU. para intervenir en el país e involucrar a la ONU en el problema”.
Mientras la violencia no cesa y numerosas personas de ambos bandos siguen perdiendo la vida, el pueblo sirio clama por la paz. “Simplemente queremos vivir”, dicen los ciudadanos de este país que vive un desgarrador conflicto interno.