Los señores de la guerra: armar a los rebeldes sirios da “beneficios a Occidente”
“Todas las intervenciones que han tenido EE.UU. y Gran Bretaña en los últimos años han sido desastrosas, después de ellos han quedado países ingobernables, divididos en pequeños grupos armados y en una situación catastrófica para la población”, indicó el analista en una entrevista a RT.
Y es que Francia se ha unido al Reino Unido es su disposición a suministrar armas a la oposición siria, incluso sin la autorización de la Unión Europea. Así, el experto considera que las ganancias por la venta de armas se ve minimizada por un juego geoestratégico “para tener el control político y económico de Siria”.
“Francia y Gran Bretaña están haciendo una política exterior totalmente independiente y a veces disidente de la Unión Europea”, indicó el Romea, quien lamenta que estos países “en su status de grandes potencias” no teman ningún tipo de sanción de organismos internacionales como la ONU.
Por otro lado, el analista hace referencia a “la paradoja” del Gobierno del presidente francés, François Hollande, pues desde París “están apoyando a los yihadistas extremistas próximos a Al Qaeda en Siria”, pero por otro lado los está “combatiendo en el norte de Mali”.
Por este motivo, el experto cree que estas acciones “son una contradicción obvia: estar armando y combatiendo” y que además parece ser que efectivamente “la guerra de por sí ya es un negocio”. Asimismo, lamenta que tras el caos, si el país “queda gobernable para las potencias neocoloniales occidentales” es mejor para ellos porque podrán “extraer petróleo” y hacer “sus rutas de tránsito y transporte”, lo que “será un nuevo mercado abierto para la inversión de mercados occidentales”.
Dos años de violencia en Siria
El conflicto sirio cumple ya dos años y en todo este tiempo decenas de miles de personas han muerto y más de un millón de ciudadanos ahora está obligado a vivir en campos de refugiados o fuera de su patria.
Mientras, París y Londres acordaron suministrar de armas a los opositores sirios para que puedan defenderse, lo que provocó duras críticas del ministro ruso de Exteriores, Serguéi Lavrov, quien afirmó que este hecho violaría las leyes internacionales.
Pero el presidente francés, François Hollande, parece hacer caso omiso a las críticas, pues este martes pidió a los líderes europeos levantar el embargo de armas a Siria para ayudar a los insurgentes a luchar contra el régimen del presidente Bashar al Assad.