China pondrá a prueba el cohete de nueva generación Chang Zheng 5
Tras lanzar exitosamente a la órbita este sábado el primer cohete portador de la nueva modificación Chang Zheng 7, de carga útil media (hasta 13 toneladas), China ha hecho públicos sus planes sobre los próximos despegues espaciales.
La misma versión de este cohete será utilizada en abril de 2017 para poner en órbita el carguero espacial Tianzhou-1, que se encuentra en la fase final de ensamblaje, señaló la portavoz del programa de vuelos tripulados Wu Ping, cuyas palabras recoge la agencia Xinhua.
En el segundo semestre de este 2016 Pekín realizará una prueba del cohete Chang Zheng 5, un representante de la nueva generación de la familia Larga Marcha (así se traduce del chino su nombre). El primer prototipo del modelo, diseñado para transportar satélites y partes de la futura estación orbital china con cargas de hasta 25 toneladas, despegará desde el centro de lanzamiento de satélites Wenchang, situado en la isla china de Hainan.
La fecha exacta de la primera prueba no ha sido determinada de momento y dependerá en mucho de las condiciones meteorológicas.
El segundo módulo orbital para la estación espacial nacional, el Tiangong-2, será lanzado a mediados de septiembre. Los 'taikonautas' que formarán la tripulación de este futuro laboratorio espacial ya han sido seleccionados y están pasando un intenso entrenamiento.
A mediados de octubre despegará la nave espacial Shenzhou-XI, que tras ascender a la altura necesaria se acoplará con el Tiangong-2. En cierto sentido será un vuelo de ida y vuelta, porque está programado que una sección modular de la Shenzhou regrese a la Tierra después del acoplamiento.
Ambos componentes de la estación orbital china despegarán con cohetes portadores de una modificación vieja, aunque perteneciente a la misma familia de lanzaderas, el Larga Marcha 2F, en servicio desde el año 1999.